A lo largo de la historia, el barro ha sido utilizado como remedio curativo para tratar las heridas externas. Incluso, los animales con alguna lesión abierta tienden a buscar lagos de agua con barro para aliviar la inflación y sanar la herida. Este remedio natural posee propiedades refrescantes, cicatrizantes, relajantes, purificadoras y desinflamantes.

Además de esto, los egipcios lo utilizaban como principio purificador y de conservación para momificar a sus muertos. Por su parte, los griegos y los romanos le daban varios usos, entre ellos tratar las fracturas. Cabe mencionar que el barro reúne dos componentes importantes, la tierra y el agua. Esta unión es la que ayuda a recuperar las impurezas de los tejidos neutralizados del cuerpo.

Según una investigación del Instituto for Antiviral Chemotherapy de la Friedrich Schiller University Jena, las sustancias orgánicas que se encuentran en el barro como lo son los minerales y las enzimas, el cuerpo o las puede absorber con mayor facilidad, permitiendo eliminar cualquier molestia.

Ahora bien, existen muchas formas de usar el barro, pues diversos productos cosméticos lo usan en mascarillas o cremas exfoliantes para tratar problemas cutáneos. Del mismo modo, el barro aplicado de manera externa hidrata la piel, desinflama los golpes, relaja el cuerpo, actúa como cicatrizante natural y también acondiciona el cabello.

A su vez, el barro también tiene un gran impacto interno, pues activa la circulación sanguínea, mantiene regulado el organismo, ayuda a una buena digestión, libre todo tipo de estrés y ansiedad, da un equilibrio hormonal y elimina las toxinas del organismo.

Tipos de barro o arcilla

Según el portal web Bambuddha, existen cinco tipos de arcilla que pueden ser utilizados con fines terapéuticos y que contienen distintas propiedades.

  • Arcilla blanca: Es la más pura y está compuesta por silicio y aluminio, lo cual la hace un remedio ideal para combatir el estreñimiento. Así mismo, se suele usar en tratamientos estéticos, para problemas de piel e incluso en enjuagues bucales.
  • Arcilla roja: Posee un alto contenido de óxido de hierro, la cual ayuda a reducir la inflamación en las articulaciones y tratar problemas circulatorios.
  • Arcilla roja: Esta se obtiene de la mezcla entre la arcilla roja y blanca y es utilizada para como mascarilla capilar.
  • Arcilla negra: Tiene un efecto cicatrizante y regenerador.
El barro aplicado de manera externa hidrata la piel, desinflama los golpes y relaja el cuerpo.

Beneficios del barro o arcilla para la salud:

  • Acción reguladora: Dependiendo el caso, la arcilla es un regulador natural de las glándulas endocrinas, que es capaz de favorecer su estimulación o inhibición.
  • Problemas cutáneos: El barro o arcilla, como también se le llama, es ideal para eliminar las células muertas y las bacterias que provocan el acné. Expertos aconsejan aplicar una mascarilla de arcilla durante 15 minutos y luego enjuagar con abundante agua. Este procedimiento se puede realizar máximo tres veces a la semana.
  • Dolores articulares: Tanto la artrosis, el reuma, la artritis, así como golpes y esguinces, se pueden aliviar con la arcilla caliente. Esta actúa como un analgésico, si se aplica en forma de cataplasma sobre la zona adolorida.
  • Estrés: Tanto la ansiedad como el estrés se pueden aliviar con un baño frío o caliente de arcilla. Esto permite purificar el organismo y fortalecer el sistema inmunológico.
  • Filtro natural: La arcilla sirve para purificar cisternas, tanques y pozos. Solamente debe colocar dos gramos de arcilla granulada en una bolsa de tela en los filtros de agua durante 72 horas para que su acción purificante se vea reflejada.