El término “hepático” se refiere al hígado que es el órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo y ayuda al organismo a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Asimismo, el Stanford Medicine Children’s Health señaló que se han identificado otras funciones del hígado entre las que se destacan:
- Producción de bilis (ayuda a transportar los desechos y a descomponer las grasas en el intestino delgado durante la digestión).
- Producción de ciertas proteínas para el plasma sanguíneo.
- Producción de colesterol y proteínas especiales para ayudar a transportar las grasas por todo el cuerpo.
- Conversión del exceso de glucosa en glucógeno de almacenamiento (este glucógeno más tarde se puede convertir nuevamente en glucosa para la obtención de energía).
- Equilibrio y producción de glucosa según fuera necesario.
- Regulación de los niveles de aminoácidos en la sangre (son las unidades formadoras de proteínas).
- Procesamiento de la hemoglobina para la distribución de su contenido de hierro (el hígado almacena hierro).
- Conversión del amoníaco tóxico en urea (la urea es uno de los productos finales del metabolismo de las proteínas y se excreta en la orina).
- Depuración de fármacos y otras sustancias tóxicas de la sangre.
- Resistencia a las infecciones mediante la producción de factores de inmunidad y eliminación de ciertas bacterias del torrente sanguíneo.
- Depuración de bilirrubina (una acumulación de bilirrubina haría que la piel y los ojos se tornasen amarillentos).
Por ello, es de vital importancia cuidar el hígado y una recomendación natural del portal Cocina Vital es consumir batido de plátano y cúrcuma, por sus propiedades hepatoprotectoras.
En consecuencia, para obtener los beneficios hay que licuar una taza de leche de coco, dos rodajas de piña, tres plátanos congelados, dos cucharadas de aceite de coco, una cucharadita de cúrcuma, media cucharadita de jengibre y una cucharadita de semillas de chía. Después, cuando se consiga una mezcla homogénea se consume y, preferiblemente, en ayunas.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, para cuidar el hígado que tener en cuenta otra recomendaciones como:
- Comer frutas y vegetales, así como proteína magra como leguminosas, pollo y pescado.
- Evitar los mariscos crudos.
- Limitar el consumo de sal, ya que la sal en la alimentación puede empeorar la acumulación de líquidos y la hinchazón en el hígado.
- Limitar el consumo de alcohol, pero si se bebe alcohol, es mejor hacerlo con moderación y lo anterior significa que no se consuma más de un trago al día si es una mujer y no más de dos si es un hombre.
- Tener una dieta saludable: esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día; menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas y se deben consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
- Hacer ejercicio: Lo ideal es realizar actividades físicas aeróbicas moderadas durante al menos 150 a 300 minutos o actividades físicas aeróbicas intensas durante al menos 75 a 150 minutos, o una combinación equivalente de actividades moderadas e intensas a lo largo de la semana.