Un estilo de vida saludable integra un balance entre la actividad física, una alimentación adecuada y, por supuesto, el descanso que necesita el cuerpo para recuperarse.

Cuando estos elementos se encuentran en sintonía, la persona alcanza un estado de bienestar que la hace más resistente a amenazas externas, como enfermedades provocadas por virus o bacterias.

De acuerdo a la definición de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, “el sistema inmunitario protege al organismo de sustancias posiblemente nocivas, reconociendo y respondiendo a los antígenos (sustancias -por lo general proteínas- que se encuentran en la superficie de las células, los virus, los hongos o las bacterias). El sistema inmunitario reconoce y destruye sustancias que contienen antígenos”.

En ese sentido, si este sistema es lo suficientemente fuerte, reduce el riesgo de contagiarse de algunas enfermedades y mejora la capacidad de respuesta del organismo a las mismas.

Según un artículo publicado en el portal web de la Clínica Mayo, “durante el sueño, el sistema inmunitario libera proteínas llamadas citocinas, algunas de las cuales ayudan a promover el sueño. Algunas citocinas deben aumentar cuando tienes una infección o inflamación o cuando estás estresado. La falta de sueño puede reducir la producción de estas citocinas protectoras. Además, los anticuerpos y las células que combaten infecciones disminuyen durante los períodos en los que no duermes lo suficiente”.

Por ello, así como hay factores que debilitan el sistema inmunológico, también hay otros que lo fortalecen. Por ejemplo, incluir en la dieta alimentos ricos en vitaminas y minerales. Una de las principales fuentes de estos nutrientes son las frutas. Por eso, la nutricionista Tatiana Zanin compartió algunas recetas de batidos naturales para subir las defensas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir cinco porciones de frutas y verduras al día. | Foto: Getty Images

En su artículo, publicado en el portal Tuasaúde, la experta recomienda el jugo de zanahoria con remolacha, una receta saludable rica en betacaroteno y hierro, ideal para subir las defensas. También, se puede preparar con jengibre para aprovechar sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, por lo que podría contribuir a prevenir enfermedades respiratorias como la gripe, la tos o el asma.

Ingredientes

  • 1 zanahoria cruda
  • 1/2 remolacha cruda
  • 1 cucharada de avena
  • 1 cm de raíz fresca de jengibre
  • 1 vaso de agua

Preparación: Lavar, pelar y picar los ingredientes. Licuarlos hasta que el jugo quede homogéneo y beber un vaso al día.

Jugo de fresa con hierbabuena:

La segunda receta compartida por la nutricionista Tatiana Zanin es el jugo de fresa con hierbabuena, un batido rico en vitamina C, antioxidantes y probióticos que ayudan a mantener la flora intestinal saludable.

Jugo verde con limón:

jugo verde con limón, rico en vitamina C y folato -esta vitamina participa en la formación y reparación del ADN-, además, puede mezclarse con jengibre y miel, cuyo consumo regular se ha asociado al aumento en las defensas del organismo.

Ingredientes

  • 2 hojas de repollo
  • 1 hoja de lechuga
  • 1 zanahoria mediana
  • 1 palito de apio
  • 1 manzana verde
  • 1 cm de la raíz fresca de jengibre
  • 1 cucharada de miel

Preparación: lavar y cortar los ingredientes. Licuar y beber un vaso al día.

Batido de papaya y avena:

Otra opción bastante popular es el batido de papaya con avena, rico en vitamina A, zinc, silicio, selenio, omegas y vitamina C, ideal para subir las defensas de manera natural.

Ingredientes

  • 1 yogur desnatado
  • 2 cucharadas de avena o salvado de avena
  • 1 nuez de Brasil o 3 almendras
  • 1/2 papaya pequeña (150 g)
  • 2 cucharadas de aguacate

Jugo de rábano y arándanos

Además de su contenido en vitamina C, tiene una acción antioxidante y también contribuye a la restauración de vasos sanguíneos y tejidos. Así mismo, posee yodo y potasio.

Por su parte, el arándano se considera como un alimento que ayuda a prevenir enfermedades degenerativas y tiene una acción antinflamatoria.

Preparación:

  • Licuar 2 rábanos limpios.
  • Agregar el zumo de tres naranjas.
  • Añadir un puñado de arándanos deshidratados.
  • Todo esto hacerlo en medio vaso de agua.