La Fundación Española del Corazón expone en su sitio web que el aceite de oliva es un alimento con capacidades para proteger contra la inflamación, el estrés oxidativo y el riesgo cardiovascular provocados por el envejecimiento.

Dentro de los beneficios del consumo de aceite de oliva, la fuente consultada destaca su capacidad para elevar los niveles de colesterol bueno (HDL), al mismo tiempo que disminuye el colesterol malo (LDL). Adicionalmente, contribuye en el control de la hipertensión arterial, reduce la aparición de trombosis y previene el desarrollo de la diabetes.

Por supuesto, es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de vincular el aceite de oliva en la dieta o incrementar su consumo. En ese orden de ideas, para optimizar sus resultados, es indispensable complementarlo con hábitos de vida saludable, como ejercicio regular y alimentación balanceada.

Si bien las cualidades del aceite de oliva han sido asociadas principalmente a la salud cardíaca y el sistema circulatorio, este alimento también tendría ciertos beneficios para el estómago y el sistema digestivo.

Según el portal Consumer, el aceite de oliva también es uno de los aliados para combatir el estreñimiento, dado que, al contener ácido oleico, vitamina E y compuestos fenólicos, estos tienen un efecto lubricante que mejoran la evacuación intestinal.

En ese sentido, el citado portal afirma que consumir de 50 a 60 ml de aceite de oliva a diario, en un rango de 20 a 30 días, reduce las molestias del estreñimiento. Una cucharada tiene alrededor de 15 ml.

No obstante, en vista de que el estreñimiento puede desarrollarse a partir de múltiples causas, lo mejor es consultar con un médico de confianza antes de intentar tratarlo con remedios caseros.

El aceite de oliva puede incluirse en la dieta mediante ensaladas o consumo directo, por supuesto, cuidando las cantidades. | Foto: Foto: Getty Images.

Otros beneficios del aceite de oliva, según Harvard

El aceite de oliva es uno de los productos más importantes y preciados en la gastronomía y en el hogar de muchas personas. Su sabor, versatilidad y aroma le dan un toque especial a cualquier plato, desde una carne, una ensalada y hasta una pasta.

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, indica que los expertos recomiendan emplear aceite de oliva en lugar de otros alimentos grasos, como la mantequilla y la margarina en barra, pero también indican que no se puede hacer que los alimentos poco saludables sean más saludables, simplemente añadiéndoles este tipo de aceite; por eso, la dieta debe contener productos naturales y que aporten nutrientes al cuerpo.

El consumo de aceite de oliva contribuye a reducir el colesterol malo, el cual puede llevar a la formación de placa en las arterias. | Foto: Getty Images

Beneficios de consumir aceite de oliva

1. Reduce las posibilidades de sufrir una muerte temprana

Además de aportar un gran sabor a las comidas y de poder ser ingerido, crudo o cocinado, ayuda a prevenir y a reducir el desarrollo de enfermedades. De acuerdo con varios estudios, su consumo ayuda a vivir por mucho más tiempo.

2. Previene enfermedades cardíacas

Una de las principales causas de muerte en el mundo son las enfermedades cardíacas, sin embargo, entre los alimentos que reducen el riesgo de contraer patologías que afectan la salud del corazón es el aceite. Este mejora la función de los vasos sanguíneos, reduce la inflamación y, según la Fundación Española del Corazón, gracias a su composición en ácidos grasos y por sus componentes antioxidantes, protege al cuerpo de la arterioesclerosis y reduce los niveles de colesterol.

El aceite de oliva es considerado como una opción más saludable para sustituir otras fuentes de grasas. | Foto: Getty Images

3. Cáncer

Este alimento tiene un efecto protector para evitar contraer cáncer de páncreas, próstata, de mama, endometrio, intestino y colon. Los antioxidantes que se encuentran en este tipo de aceite ayudan a reducir el daño oxidativo causado por los radicales libres. Asimismo, este efecto podría relacionarse con el alto contenido de ácido oleico predominante en este alimento.

4. Mejora las funciones cognitivas

El aceite de oliva contiene unos compuestos bioactivos denominados como polifenoles, estos actúan como antioxidantes y antiinflamatorios, lo que potencia el nacimiento de nuevas neuronas. Asimismo, según varios expertos, las personas que consumen mayor cantidad de grasas tienen mejor memoria, y algunas gozan de unas mejores funciones cognitivas y metabólicas.

Cabe resaltar que este tipo de grasa favorece la formación de membranas celulares y del tejido cerebral.

5. Ayuda a perder peso

Si se utiliza dentro de una dieta saludable en general, su consumo sí puede llegar a influir en la pérdida de peso dentro de dicha alimentación, siempre y cuando el consumidor no se exceda en las cantidades.

El consumo de este tipo de grasa sana acelera el metabolismo. Según el director de la Asociación Australiana de Oliva, Leandro Ravetti: “una dieta rica en aceite de oliva virgen extra puede favorecer la de pérdida de peso y su mantenimiento. De hecho, las dietas bajas en grasa son menos efectivas que aquellas que contienen grasas saludables para este fin”.