Agregar la avena en la dieta alimenticia es un paso para las personas que pretenden adelgazar. Por sus componentes y beneficios, su consumo ayuda a bajar kilos.
La Fundación Española de la Nutrición señala que la avena es la “reina de los cereales”, debido a las siguientes condiciones: es una fuente de proteínas de no tan alto coste, cuenta con un alto contenido en fibra, tiene un valor energético de 361 calorías por cada 100 gramos, aporta ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados (grasas saludables), posee altos niveles de hierro, magnesio, potasio, zinc, fósforo, vitamina B1, B6, E y folatos.
A su vez, la Fundación Española del Corazón afirma que la avena ayuda a regular los niveles del colesterol: “los alimentos que contienen al menos 1 gramo de betaglucanos se puede decir que contribuyen a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo, pero para obtener este beneficio es necesario consumir 3 gramos de betaglucanos al día, por lo menos”. El aporte de fibra de la avena reduce los niveles de glucosa después de haber comido.
Con base en esta información, hay tres beneficios principales, que son los que permiten a una persona adelgazar:
- Poder saciante: la avena tiene un efecto saciante, lo cual genera que se reduzca naturalmente el apetito. Esto ocasiona que una persona pueda estar satisfecho con la menor cantidad de comida, aunque manteniéndose en una buena alimentación.
- Ralentiza la absorción de grasas: la avena consigue que las calorías no empleadas tras el consumo de alimentos, se puedan usar después como fuente de energía. Es decir, este producto puede almacenar energía sin transformarla en grasa saturada. Durante el día, esta grasa puede disminuirse para ser guardada como energía.
- Activación del metabolismo: los mucílagos con los que cuenta la avena en su composición logran acelerar las funciones del metabolismo, aumentando el gasto calórico del día sin la necesidad de realizar actividades extras a las rutinarias.
¿Cómo vincular la avena a la alimentación?
El portal MensHealth sostiene que la avena cuenta con la posibilidad de tener varias presentaciones de consumirla:
- Bizocho proteico de avena al microondas: con avena molida, especialmente cuando queda en forma de avena, se puede mezclarla con claras de huevo, levadura, aceite y edulcorante. Todo esto junto creará una masa para crear bizcochos luego de dejarla reposar entre 10 a 12 minutos en el microondas.
- Pancakes de avena: con 100 gramos de harina de avena (similar al ejemplo anterior), 120 mililitros de leche desnatada o soja, 2 huevos, aceite, levadura, canela y miel, se pueden preparar pancakes que se pueden consumir en el día o noche. El primer paso es mezclar la avena con la leche, luego se le adicionan los huevos y la levadura. Acto seguido, en una sartén antiadherente caliente, se vierte la mezcla hasta que empiece a burbujear. Con el paso del tiempo, pasará de estar líquido a ser una masa sólida con la que se le puede darle forma de pancake.
- Galletas: esta presentación es perfecta para acompañar cualquier comida durante el día. Se necesitan 200 gramos de avena con sabor a chocolate blanco, una cucharada de levadura, dos huevos, dos terrones de azúcar moreno, aceite de oliva virgen extra y coco rallado. La avena se une con la levadura y azúcar, mientras se mezclan los huevos y el aceite por otro lado. Cuando ambas estén condensadas, se mezclan entre sí para luego precalentar el producto final en el horno a 200°C durante cuatro horas. Culminado ese periodo de tiempo, se dejan a la intemperie para que estén a la temperatura ambiente y terminar de formar las galletas.
- Batidos: por último, la avena se puede mezclar con canela, manzanas y otras frutas en una licuadora para crear un batido. Este funciona para las personas que, además de una buena alimentación, se ejercitan para reducir o tonificar el cuerpo.