La calabaza es uno de los símbolos del Halloween, pero también una de las estrellas de cualquier cocina por su gran sabor y sus propiedades nutricionales. A pesar de que comúnmente se le considera una verdura, realmente es una fruta y su alto contenido en betacaroteno, potasio y vitaminas A, B, C y E la convierten en uno de los superalimentos para incluir en el plan de alimentación.

Nutritienda menciona los beneficios del consumo de la calabaza, perfecta para acompañar una carne o un pescado, para tomar en crema, asada o incluso en una ensalada templada.

Mejora el aspecto de la piel

  • La calabaza mejora el aspecto de la piel, ya que es fuente de vitamina C y E, antioxidantes que contribuyen a bloquear los radicales libres, que favorecen la aparición de arrugas y flacidez en esta zona, teniendo un peso decisivo en el envejecimiento de la piel. Además, la vitamina C también contribuye a la formación de colágeno para que la piel se mantenga hidratada y protegida frente a los agentes externos.

Ayuda al correcto funcionamiento del sistema inmune

Es ideal para cualquier dieta de adelgazamiento

  • La calabaza es rica en agua - posee más de un 90 % - lo que ayuda a prevenir la deshidratación y la retención de líquidos. Destaca su baja densidad calórica y su escaso contenido graso, lo que hace que no aporte casi calorías y la convierten en una opción ideal para los que se encuentren en un proceso de pérdida de peso. Además, su aporte en fibra hace que aumente la sensación de saciedad, estimula el tránsito intestinal, arrastra las toxinas y facilita las digestiones.

Gran aliada para la salud visual

  • Al igual que la zanahoria, la calabaza es una gran aliada para la salud visual, ya que contiene vitamina A que contribuye al mantenimiento de la visión en condiciones normales. Las frutas y hortalizas de color naranja son antioxidantes gracias a los carotenoides como el betacaroteno, que dan el color anaranjado a la calabaza, y son precursores de la vitamina A, que es fundamental para la salud visual. Además, contiene otros carotenos como la luteína o la zeaxantina que se encuentran de forma natural en los ojos.

Regula la presión arterial

La calabaza, al ser fuente de vitamina C, contribuye al funcionamiento normal del sistema inmune. | Foto: Reuters / Autor: Andrew Couldridge

¿Cómo elegir una buena calabaza?

En lo primero que hay que fijarse a la hora de comprar una calabaza es en la piel; si es fina y muy lisa puede estar todavía verde, por lo que lo ideal es que la piel sea gruesa y firme, sin imperfecciones, magulladuras ni golpes. Las calabazas más tiernas y jugosas son las que tienen la piel brillante.

Además, es importante que mantenga su rabo o péndulo, ya que esto evita que la calabaza pierda humedad. Y este debe estar seco, puesto que significará que está lista para consumir. El tamaño en la calabaza también importa, es preferible que sea pequeña y pesada, porque tiene más sabor que las grandes y ligeras.

Una vez abierta dura, como mucho, una semana bien tapada en la nevera, por lo que es mejor no abrirla hasta el momento en el que se vaya a consumir.

*Con información de Europa Press.