El cuidado del cabello es un tema de interés para muchas personas que enfocan su atención en el estilo y apariencia que pueden lucir gracias a este. Por ello, es común acudir a productos como champús, acondicionadores, cremas o diversos tratamientos para la salud capilar.
Asimismo, existen algunos remedios caseros que se basan en ingredientes naturales para trasladar sus bondades al cuidado del cabello. No obstante, dado que no todos los cuerpos reaccionan de la misma manera, es conveniente consultar previamente con un especialista.
De acuerdo con el portal Mejor con Salud, el romero es una de las plantas más comunes en las recetas de medicina tradicional. Este ingrediente, además, es usado en cosméticos naturales, pues posee propiedades limpiadoras y destaca por su contenido de vitamina A, vitamina B2, vitamina B6 y vitamina C. Además, es fuente de minerales como el calcio, fósforo, hierro, magnesio y zinc.
Beneficios para el cabello y el cuero cabelludo
La salud capilar puede deteriorarse por varios factores, entre ellos figuran el mal cuidado o algunas enfermedades como la alopecia. Por esta razón, ante la aparición de síntomas extraños en el cabello (caída, pérdida de volumen, fragilidad, etc.) es conveniente acudir a un especialista médico para examinar el caso.
El citado portal expone que el uso del romero para cuidar el cabello presenta varios beneficios. Por ejemplo, ayuda a prevenir su caída gracias a la capacidad para activar la circulación en el cuero cabelludo. La manera más recomendada de utilizar esta planta es mediante la preparación de una infusión.
Ingredientes:
- Tres cucharadas de hojas de romero secas (45 g)
- Dos vasos de agua (400 ml)
Preparación:
- Poner a hervir el agua.
- Cuando alcance su punto de ebullición, se retira del fuego y se incorporan las hojas de romero secas.
- Cubrir el recipiente y dejar reposar durante 10 minutos.
- Colar la infusión y esperar a que se enfríe.
Esta infusión se aplica directamente sobre el cuero cabelludo, es decir, de manera tópica. A continuación, se deben realizar masajes con las yemas de los dedos para activar la circulación. El procedimiento puede repetirse una o dos veces al día durante, por lo menos, un mes. Por supuesto, en caso de notar alguna reacción alérgica, su uso debe suspenderse de inmediato.
Hábitos que benefician al cabello:
Actividad física
el deporte contribuye a la buena salud del pelo de tres formas esenciales, reduciendo la cantidad de cortisol (hormona del estrés) en sangre, manteniendo inalterados los proteglicanos, determinantes para el ciclo del crecimiento adecuado del cabello.
Además, mejora la oxigenación en el cuero cabelludo y la cantidad de nutrientes que llegan al folículo piloso, lo que favorecerá al crecimiento del pelo. Por su parte, la sudoración luego del ejercicio contribuye a la eliminación de toxinas a través de los poros del cuero cabelludo, y estabilizando el ciclo de caída y crecimiento.
Alimentación adecuada
Para cualquier proceso fisiológico la dieta es esencial, y para la salud capilar no es la excepción, el folículo piloso requiere una cantidad variada de minerales, proteínas y vitaminas que cumplirán un papel vital en el buen desarrollo y crecimiento del tallo piloso.
Dentro de los micronutrientes necesarios los más comunes son: vitamina A, del grupo B, C, E, D, Zinc, Magnesio, Azufre, Cobre, Hierro, Selenio, ácido fólico. Estos se obtendrán de una dieta balanceada, es decir de un menú semanal que aporte todas las fuentes de nutrientes necesarios.
No fumar
El tabaco genera cambios nocivos en el pelo tales como la pérdida de vitalidad, fragilidad y daño en la cutícula. Estos cambios se deben a la afección que existe en la microcirculación del folículo piloso que producen las micropartículas tóxicas contenidas en el humo, ya sea por aspiración o de forma pasiva. “También se ha encontrado que altera la producción de ciertas hormonas como por ejemplo el estrógeno, favoreciendo al envejecimiento prematuro del cuero cabelludo, y aumentando la producción de testosterona haciendo el tallo piloso más débil. La pérdida de elastina y colágeno perjudican considerablemente la estructura capilar” puntualiza Sánchez.