Los humidificadores son dispositivos que emiten vapor para aumentar los niveles de humedad en el aire, lo que puede aliviar malestares como congestión nasal, a la vez que ayuda a disolver el moco de manera que la persona lo pueda expectorar.

El aire humidificado puede aliviar las molestias producidas por los resfriados y la gripa. No obstante, es importante usarlo correctamente y mantenerlo limpio para evitar complicaciones de salud, asegura la Clínica Mayo.

De acuerdo con el medio especializado Medical News Today, estos dispositivos pueden ayudar a prevenir la influenza, por ejemplo.

“Los autores de un estudio indicaron que los humidificadores podrían reducir el riesgo de contraer gripe. Después de agregar el virus de la influenza al aire con un simulador de tos, los investigadores determinaron que los niveles de humedad por encima del 40 % desactivaban rápidamente las partículas del virus, haciéndolos menos propensos a ser infecciosos”, cita la publicación.

Otro de los beneficios que se les atribuyen es que agregar humedad al aire puede también adicionarla a las vías respiratorias, lo que puede hacer que la tos sea más productiva; es decir, que la persona al toser libere flema atrapada o pegajosa. Cuando el aire está seco, esto no ocurre.

El manejo del aire en espacios interiores es clave para mantener una buena salud respiratoria. | Foto: Getty Images

Por otro lado, incrementar la cantidad de humedad en el aire también puede reducir los ronquidos. Si el aire está seco, las vías respiratorias de una persona tienen menos probabilidad de lubricarse lo suficiente, lo que puede empeorar este incómodo malestar.

Medical News Today indica que muchos tipos de unidades de calefacción bombean aire seco y caliente en la casa o la oficina, lo que puede hacer que la piel se seque o ponga escamosa. No obstante, el uso de un humidificador agrega humedad al aire interior reduciendo la ocurrencia de piel seca y agrietada.

Por último, la humedad de este aparato puede ser útil en el hogar. Cualquier planta amante de la humedad puede llenarse de energía y los pisos de madera o los muebles pueden durar más tiempo. La humedad también puede evitar que se acumule electricidad estática.

Riesgos

Si bien son útiles, los humidificadores pueden provocar enfermedades si no tienen el mantenimiento adecuado o si los niveles de humedad permanecen demasiado altos.

Si se hace uso de estos dispositivos es importante asegurarse de controlar los niveles de humedad y mantenerlos limpios. Los humidificadores sucios pueden generar moho o bacterias. Si una persona tiene alergias o asma, es importante consultar al médico antes de utilizar un humidificador.

Estos aparatos convierten el agua en vapor que se puede respirar en el aire. Si el tanque de agua de la unidad está sucio, el vapor que una persona respira estará en las mismas condiciones. Así mismo, un tanque oscuro y húmedo propicia los gérmenes.

No es recomendable mucha humedad. Solo un poco es bueno, pero los niveles excesivos pueden dificultar la respiración y empeorar algunos síntomas de la alergia. Por ejemplo, los alérgenos comunes, incluyendo los ácaros, los hongos y el moho, se desarrollan en ambientes húmedos.

Las plantas pueden beneficiarse del humidificador al interior del hogar, gracias a la humedad que este produce. | Foto: Getty Images

Según la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos, los niveles de humedad en interiores deberán ser entre el 30 % y el 50 %. Los niveles de humedad superiores al 60 % se consideran demasiado altos.

Evitar el agua del grifo

Muchos fabricantes recomiendan usar solo agua pura y limpia en los humidificadores, debido a que el agua de grifo puede contener altos niveles de minerales y otras partículas comparada con la purificada o destilada.

Los minerales del agua de la llave pueden acumularse en la máquina, provocando que se desgaste más rápido de lo esperado. Este dispositivo también puede lanzar estos minerales al aire y una persona los podría inhalar. Las partículas también se alojan en la habitación en forma de polvo.

Recomendaciones generales

La Biblioteca de Medicina de Estados Unidos brinda algunos consejos tendientes a que las personas hagan un buen uso de este dispositivo.

- Utilizar siempre un humidificador de vapor frío (vaporizador), especialmente para los niños. Los humidificadores de vapor caliente pueden causar quemaduras si una persona se acerca demasiado.

- Colocar el humidificador aproximadamente a dos metros de distancia de la cama.

- No dejarlo funcionando mucho tiempo.

- Los humidificadores se deben vaciar y limpiar diariamente, dado que las bacterias se pueden multiplicar en aguas estancadas.

- Utilizar agua destilada en lugar de agua de la llave.