Cocinar resulta placentero para muchos y además es la forma más segura de conocer los alimentos que consume el organismo y su calidad nutricional. Pese a que es una tarea que muchos disfrutan, la diversión termina cuando se debe limpiar y poner todo en orden en la cocina. Las grasas de los alimentos y otras sustancias que se desprenden al cocinar se van quedando impregnadas en la estufa, los electrodomésticos, las puertas y otras áreas de la cocina.
Para remover la grasa hay cientos de productos químicos en el mercado, que aunque ayudan con este propósito, su uso excesivo puede tener un impacto negativo en la salud de las personas y el medio ambiente. A la par de estos elementos, hay otra cantidad de productos que están en el hogar que ayudan a eliminar la grasa de la cocina de una forma fácil, segura y, sobre todo, económica. A continuación algunos trucos reseñados por el portal MejorConSalud:
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es el producto estrella por estos tiempos y, gracias a su efecto abrasivo, puede ser utilizado para despegar la grasa que esté adherida a muebles, electrodomésticos y paredes. Además, este compuesto tiene un efecto antibacteriano que ayuda a combatir los microorganismos que proliferan en las superficies.
Hay dos formas en las que se puede hacer uso del bicarbonato de sodio para remover la grasa. La primera consiste en esparcir una cantidad de bicarbonato de sodio suficiente sobre el área a limpiar, esperar a que actúe con la grasa en un lapso entre 10 y 20 minutos para luego removerla con la ayuda de un limpión. La segunda forma se utiliza cuando la grasa está muy adherida, en ese caso, se debe humedecer primero la superficie que está llena de grasa con un poco de zumo de limón o de agua, para luego esparcir el bicarbonato y repetir los pasos de la primera fórmula.
Vinagre de sidra de manzana
El vinagre de manzana es uno de los grandes aliados de la limpieza en el hogar, cuenta con propiedades antisépticas que ayudan a eliminar las bacterias que se reproducen en las superficies y sus ácidos actúan contra la grasa para removerla con gran facilidad.
Para hacer uso de este producto, se necesita una taza de vinagre de manzana (250 ml) y una taza de agua (250 ml). Se debe empezar diluyendo el vinagre de manzana en el agua y llevando esta mezcla hasta el punto de ebullición. Surtido ese proceso, luego se debe dejar reposar para después humedecer la esponja o el trapo con el que se vaya a limpiar y remover los rastros con un poco de agua tibia. Se recomienda repetir la aplicación de esta receta las veces que sea necesario para eliminar la grasa.
Vinagre blanco
Las cualidades del vinagre blanco son similares al vinagre de sidra de manzana para remover la grasa de las superficies. Además, limpia, desinfecta y neutraliza los malos olores. Los ingredientes que se necesitan para esta receta son media taza de vinagre blanco (125 ml) y media taza de agua (125 ml). Se deben verter los dos ingredientes en un recipiente para ponerlos a hervir. Luego de que haya hervido, se vierte la mezcla en un frasco con atomizador para esparcir el líquido sobre las superficies que tengan grasa. Se recomienda que, en caso tal de que la grasa sea difícil de remover, se agregue un poco de bicarbonato de sodio, se dejen actuar los ingredientes y luego removerlos con la ayuda de un limpión.
Posos de café
“Se cree que los posos o restos de café podrían ser una de las soluciones más efectivas y ecológicas para deshacerse de la grasa adherida a los platos y superficies”, afirma MejorConSalud. Pese a lo anterior, no hay evidencias científicas que respalden esta función. Para ponerlo en práctica, se debe esparcir los posos de café sobre los platos, sartenes o superficies que se deseen limpiar y frotarlos con una esponja.