Estar bajos de nota es una sensación que todas las personas reconocen, y no es extraña. Por el contrario, es natural que la rutina diaria, el trabajo, los problemas en la familia y diversas circunstancias incidan en el bienestar emocional de las personas.
No obstante, lo que no es sano es que ese estado anímico se prolongue en el tiempo, debido a que puede convertirse en un trastorno crónico. De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, Medline Plus, la depresión clínica se caracteriza porque “los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria”.
Esta condición no distingue edades ni sexo, todas las personas son vulnerables a presentar un cuadro de depresión por diversas causas. Entre los síntomas que permiten identificar que la tristeza es algo más serio se listan:
- Problemas para dormir.
- Falta o aumento del apetito.
- Ausencia del goce de las actividades que le generan placer a la persona.
- Bajo deseo sexual.
- Pensamientos negativos, inclusive hasta el punto de contemplar la muerte o el suicidio.
- Irritabilidad.
- Sentimientos de odio hacia sí mismo.
- Problemas para mantener la concentración.
También puede ser de interés...
“Más que solo una tristeza pasajera, la depresión no es una debilidad y uno no puede recuperarse de la noche a la mañana de manera sencilla”, indica el portal sobre información médica de Mayo Clinic. De acuerdo con esta entidad, hay quienes pueden requerir un abordaje con medicamentos o terapias con profesionales.
¿El café sirve para mejorar la depresión?
Existen diversas opciones para aliviar los síntomas asociados a este trastorno, desde el tratamiento médico, citas con el psicólogo, terapias alternativas, hasta realizar cambios en el estilo de vida.
Precisamente, se ha extendido la creencia de que el café puede tener determinada influencia en la mejoría del estado depresivo. De acuerdo con el portal La Mente es Maravillosa, especializado en temas de salud mental, hay opiniones a favor y en contra de los aparentes beneficios de la cafeína sobre la depresión.
Es preciso aclarar que la cafeína no es exclusiva de este grano, por el contrario, “se encuentra en las bebidas más populares del mundo, que incluyen té, café, bebidas energéticas y muchos refrescos”, indica el referido portal. Una de las características de este compuesto que puede incidir en el estado anímico.
Un estudio que involucró a cerca de 350.000 sujetos de análisis, referenciado por el blog especializado, demostró que la sustancia ejercía un efecto protector contra el desarrollo de la depresión. A este se suman otras investigaciones que han asociado el consumo del café con una mejor disposición durante el día y con la disminución del riesgo de padecer de depresión.
Lo anterior responde a la acción antioxidante propia de la cafeína, que es conocida por prevenir el daño causado por los radicales libres a las células. Pero, además, este componente es famoso por su efecto estimulante en el organismo, favoreciendo la producción de serotonina y dopamina, que generan una sensación de bienestar que puede ser momentánea.
Justo en ese aspecto recae también el riesgo de su consumo en pacientes con depresión, debido a que pueden desarrollar una adicción a la sensación revitalizante del café y generar un síndrome de abstinencia, lo que termine deteriorando aún más la salud mental y física de las personas.
De acuerdo con el portal Middle Sex Health, “si normalmente tomas bebidas con cafeína, dejar de tomarlas puede generarte un estado de ánimo depresivo hasta que el organismo se adapte a la falta de esta sustancia”, por ello, sugieren, es mejor evitar su consumo si se padece de algún trastorno en la salud mental.
La recomendación principal siempre será acudir a los profesionales de la salud para conocer el tratamiento ideal para abordar esta condición.