Los callos son una capa dura y engrosada que se crea en algunas partes de los pies, pero principalmente surgen en el talón y la planta. Por lo general, todas las personas los sufren por lo menos una vez en la vida y, cuando esta molestia aparece suele ocasionar dolor intenso y pueden llegar a generar presión al momento de calzar los pies.
De acuerdo con el portal web Cuídate Plus, en la aparición de los callos influye factores como el tipo de calzado, la sequedad de la piel, la forma de caminar o la deformidad de los pies. Por lo general, los helomas como también se le conocen, causan distintos síntomas como sensibilidad, dolor debajo de la piel, descamación, piel cerosa, áreas gruesas y duras. Además, existen diferentes tipos de callos y son los siguientes:
- Callos duros: este tipo de callos es el más común y suele aparecer en las falanges de los dedos, en la parte superior, puntas y entre los dedos de los pies.
- Callos blandos y suaves: este tipo de helomas aparecen por lo general entre los dedos de los ´pies y se diferencia de los callos duros porque tienen una consistencia gomosa y lechosa que se debe a la excesiva humedad de los pies.
- Callos vasculares y neurovasculares: como tal, los helomas vasculares tienen las mismas características que los callos duros, con la única excepción de que en su interior crecen vasos sanguíneos, por lo cual pueden provocar una especie de hernia en la dermis. En cuando a los neurovasculares, se añade la presencia de tejido nervioso y esto puede ser muy doloroso hasta el punto de generar un sangrado.
Por tal motivo, el portal Mejor con Salud, da a conocer una serie de ingredientes caseros que combaten los callos en los pies. Sin embargo, antes de ponerlos a prueba, la mejor opción es consultar con un profesional de la salud.
Ajo
El ajo se caracteriza por sus ácidos y compuestos sulfurosos, los cuales ayudan a eliminar los callos y las durezas a su alrededor. Este alimento puede estar acompañado por aceite de oliva para ser aplicado en la zona afectada.
Cebolla
Los ácidos de la cebolla permiten ablandar la piel callosa. Solo basta con aplicar media cebolla durante toda la noche y luego utilizar una piedra de pómez.
Zumo de limón y vinagre
El zumo de limón y vinagre se caracteriza por erradicar los callos en los pies. Esta mezcla se debe diluir en un litro de agua tibia, para luego verter en un recipiente donde se pueda colocar los pies en remojo.
Otros métodos naturales
Cremas exfoliantes: Estas cremas son una gran opción para eliminar las células muertas de la piel, ya que estos productos para callos tiene en su mayoría ingredientes como ácido salicílico, urea o lactato de amonio. Además, son de muy fácil acceso.
Pasta de bicarbonato de sodio: Esta funciona como alternativa a las cremas exfoliantes comerciales. En este caso es necesario realizar una mezcla de dos cucharadas de agua con el bicarbonato de sodio para formar una pasta, la cual deberá ser aplicada en los callos y cubierta con calcetines o vendajes. La pasta puede ser mezclada con gotas de jugo de lima para mejorar su efectividad.
Almohadillas protectoras: Estas almohadillas están hechas para prevenir o proteger los calles, gracias a que reducen la fricción estimulando al mismo tiempo la piel afectada para que sane de forma favorable. Una de sus ventajas es que viene de diferentes tamaños y formas, además que son de fácil acceso.
Cremas suavizantes para la piel: Estas cremas son un gran aliado a la hora de combatir los callos y suavizarlos. Lo recomendable es humectarlas áreas de piel afectadas durante la noche. En este caso, también es bueno utilizar una media o vendaje después de humectar la zona, ya que esto ayudará a proteger y retener la humedad mientras que la persona duerme.