Los callos y los hongos son dos detalles que pueden presentarse en la piel de las personas, causando inseguridades para algunos debido a su apariencia. Así mismo, en algunas ocasiones, pueden evolucionar hasta el punto de tornarse bastante molestos.
Con respecto a los callos y callosidades, estas son capas duras y gruesas de piel que aparecen cuando la piel intenta protegerse la fricción o la presión. Por ejemplo, las personas que levantan pesas suelen desarrollar callos en sus manos, lo mismo ocurre con los dedos de los guitarristas o músicos que interpreten instrumentos de cuerda.
De acuerdo con el portal especializado en medicina Mayo Clinic, las personas sanas no necesitan tratamiento para los callos, a menos de que generen dolor. En ese sentido, destaca que, para la mayoría de personas, basta con eliminar la fuente de fricción para que los callos desaparezcan naturalmente, sin necesidad de aplicar agentes externos.
En caso de que los callos se tornen dolorosos o se inflamen, es conveniente acudir a un especialista médico. La misma recomendación aplica para personas son diabetes o flujo sanguíneo deficiente, ya que incluso una lesión pequeña puede derivar en una infección.
Por otra parte, el tratamiento de los hongos resulta un poco más complejo. De acuerdo con información de la enciclopedia médica MedlinePlus, los hongos pueden ser difíciles de matar, especialmente aquellos localizados en los pies, puesto que permanecen en un ambiente propicio para su desarrollo (húmedo a causa del sudor, sin ventilación y en total oscuridad).
“Para las infecciones en la piel y las uñas, se pueden aplicar medicamentos directamente sobre el área infectada. Los medicamentos antimicóticos por vía oral también se encuentran disponibles para las infecciones graves”, anota MedlinePlus.
¿Existen tratamientos naturales?
La medicina tradicional presenta algunas opciones de remedios caseros para tratar los callos y los hongos. Sin embargo, antes de intentar cualquiera de ellos, es recomendable consultar con un especialista médico para evaluar su pertinencia.
El portal PanoramaWeb reseña algunos remedios caseros que pueden ser útiles al momento de eliminar los callos y los hongos. Uno de ellos se basa en las propiedades del bicarbonato de sodio:
El primer paso consiste en mezclar cuatro cucharadas de bicarbonato, dos de agua y un par de gotas de lima; luego, se aplica la pasta en los pies.
Después, se deben cubrir con medias y dejarlos reposar durante toda la noche. A la mañana siguiente, se enjuagan y se secan muy bien.
El magazín El Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar señala que, por un lado, el bicarbonato de sodio puede servir como un exfoliante casero para suavizar la piel de los pies y combatir las molestas durezas presentes mayormente en los talones; y por otro lado, es efectivo para el tratamiento del mal olor y los hongos que pueden desarrollarse en esta parte del cuerpo.
Otros remedios naturales
Con cebolla
Se pueden eliminar los callos de los pies frotando la mitad de una cebolla directamente sobre la piel afectada. La cebolla tiene propiedades antiinflamatorias que reblandecen la piel engrosada.
Con manzanilla
Otro de los remedios caseros que quitan los callos de los pies es la manzanilla, una planta medicinal que los elimina sin dolor alguno: preparar dos tazas de té y sumergir los pies en la infusión durante 15 minutos; mientras esto sucede, masajear el área con una piedra pómez.
Con limón
Este remedio casero es sencillo y rápido de hacer, ya que para eliminar los callos en los pies. Tan sólo se necesita aplicar unas gotas de limón sobre estos y dejarlas actuar durante toda la noche.
A la mañana siguiente, enjuagar los pies y protegerlos de la fricción con medias. Hacer este truco de belleza durante una semana y para notar el cambio.