En muchas ocasiones el cáncer aparece sin avisar y ello genera un caos en la vida, pues ese tipo de noticias afectan irremediablemente no solo la salud física de la persona, sino también la mental, emocional y a su círculo más cercano.
Es por ello, que hay algunos síntomas de alarma con los que el cuerpo habla y a los cuales hay que prestar atención para evitar que las enfermedades se desencadenen, así como también lo mejor es optar por una alimentación saludable y cambiar muchos malos hábitos, que tarde o temprano terminarán afectando la salud.
En ese sentido, hay que aclarar que el cáncer consiste en un aumento exagerado de células dañadas. “Estas células tal vez formen tumores, que son bultos de tejido. Los tumores son cancerosos (malignos) o no cancerosos (benignos)”, de acuerdo con el Instituto Nacional de Cáncer de los Estados Unidos.
Según la Sociedad Americana de Oncología Clínica, en el caso del cáncer de próstata, inicialmente no presenta ningún tipo de síntoma, por lo que es difícil detectarlo tempranamente, pero es posible detectarlo mediante análisis PSA, por sus siglas en inglés, que traducen prueba del antígeno prostático específico o el DRE, que es el examen mediante tacto rectal.
Asimismo, en Medline Plus, destacan que las causas aún son desconocidas para los investigadores, y cualquier varón puede desarrollarlo, pero hay ciertos factores que pueden favorecer su aparición y expansión.
Algunos de ellos son la edad, ya que cuanto mayor es un hombre, aumentan sus posibilidades de padecerlo. Así como el historial de esta enfermedad en la familia, pues si en la línea ascendente hay pacientes con cáncer de próstata, la probabilidad aumenta.
Además de ello, las “personas obesas quizás estén a un riesgo más alto de padecer cáncer de próstata, comparadas con las que se considera están a un peso saludable, aunque los estudios han producido resultados mixtos. En las personas obesas, es más probable que el cáncer sea más agresivo o que recurra después del tratamiento inicial”, registra Mayo Clinic.
También es posible que el cáncer de próstata se extienda hacia los órganos más cercanos, como la vejiga, o diseminarse por el torrente sanguíneo o el sistema linfático hasta los huesos u otros órganos. El cáncer de próstata que “se extiende a los huesos puede provocar dolor y fracturas. Una vez que el cáncer de próstata se extendió a otras zonas del cuerpo, todavía puede responder al tratamiento y puede controlarse, pero no es probable que se cure”, informa MC.
Es así como desde los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades destacan algunos síntomas a los cuales hay que prestar especial atención y acudir inmediatamente al médico para -bien sea- descartarlo, o poder tratarlo a tiempo:
- Dificultad para comenzar a orinar.
- Flujo de orina débil o interrumpido.
- Micción con frecuencia, especialmente por la noche.
- Dificultad para vaciar la vejiga por completo.
- Dolor o ardor al orinar.
- Sangre en la orina o el semen.
- Dolor persistente en la espalda, las caderas o la pelvis.
- Dolor al eyacular.
- Dolor en los huesos.
- Extraña pérdida de peso.
De otro lado, cabe destacar que los ministros de Sanidad (salud) de la Unión Europea (UE) ampliaron su recomendación de detección precoz, que ya incluía el cáncer de mama, cervical y colorrectal, a los de pulmón, próstata y gástricos para reducir la mortalidad en pacientes oncológicos y reducir la incidencia de los cánceres invasivos.
Esto, dado que la detección del cáncer es solo un elemento, el Consejo también recomienda garantizar procedimientos de diagnóstico y tratamientos adecuados, oportunos y complementarios para aquellas personas con una prueba de detección positiva.
Este enfoque en la viabilidad de implementar programas de detección del cáncer se produce en el contexto de la pandemia de Covid-19, que interrumpió los programas de prevención y promoción de la salud y afectó negativamente el acceso al diagnóstico y tratamiento tempranos del cáncer, como informó Europa Press.