De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, el estrés “es un sentimiento de tensión física o emocional” como consecuencia de una frustración o por una situación que produce nerviosismo.
Es de mencionar que la entidad americana señala que el estrés puede ser positivo cuando colabora en el cumplimiento de un objetivo, o quizá, evitar algún peligro. Sin embargo, cuando este sentimiento permanece es perjudicial para la salud.
Existen dos tipos de estrés: agudo y crónico. El primero se experimenta en situaciones de corto tiempo que no tienen mayor trascendencia, como por ejemplo, practicar un ejercicio extremo; el segundo, permanece en un tiempo prolongado y es causado por problemas laborales, de dinero, entre otros.
Las consecuencias de tener estrés
El estrés crónico puede desarrollar muchos problemas sobre la salud, en lo que se encuentran:
- Presión arterial alta: la Clínica Mayo señala que la presión arterial alta es la “fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de tus arterias”, que puede traer complicaciones sobre el corazón. Es de mencionar que esta afección también se denomina hipertensión y los síntomas no los perciben aquellos que la presentan, por lo que puede ser aún más peligrosa por lo silenciosa que es.
- Diabetes: es una enfermedad donde el páncreas no produce insulina (tipo I) y/o hay una resistencia de las células a ella (tipo II). Existe otra clase de diabetes que aparece en el embarazo, que en algunas ocasiones desaparece luego del parto.
- Obesidad: tal y como lo señala la Organización Mundial para la Salud (OMS), la obesidad y el sobrepeso es “una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud”, informando que en el 2016 más de 1.900 millones de adultos de más de 18 años en ese momento tenían sobrepeso. Una condición que afecta a gran escala la salud del cuepro.
- Ansiedad: la Clínica Mayo la define como un trastorno que es parte de la vida cuando aparece eventualmente. No obstante, cuando las preocupaciones son abrumadoras y la zozobra no se puede controlar, este trastorno puede afectar de manera negativa la vida de una persona.
- Acné: la entidad americana explica que el acné “es un trastorno de la piel” que se debe a que los folículos pilosos se tapan por la acumulación de grasa y de células muertas. Existen tratamientos y cremas que prometen eliminarlos; sin embargo, se debe tener en cuenta que eventualmente aparecen y desaparecen, relacionándolo, en la mayoría de las veces, con adolescentes.
- Estreñimiento: es una afección en la que hay una dificultad para evacuar porque las heces son duras y grumosas. En algunas ocasiones el autocuidado no es suficiente, por lo que consultar con un médico puede ser la solución quien indicará el tratamiento a seguir.
El estrés y la transformación de la apariencia física
Un artículo publicado por National Institutes of Health, explica que el estrés puede provocar canas, sin embargo, es importante mencionar que es natural su aparición, se da porque “los folículos producen menos melanina y eso provoca las canas”, asegura MedlinePlus.
Según la NIH, el estrés hace parte de la pérdida de las células que son productos de los melanocitos, los pigmentos los cuales producen el color en el cabello, que cuando estas disminuyen aparecen las canas.
¿Cómo controlar el estrés?
La Clínica Mayo revela algunos hábitos que pueden contrarrestar el estrés como:
- Hacer ejercicio para la salud no solo física sino mental.
- Realizar los hobbies que más gusten, ya sea leer libros, o ir al cine.
La entidad de investigación americana asegura que aunque ver televisión, o permanecer un tiempo en internet, parezcan actividades de distracción que contrarrestan el estrés, no es así, porque pueden ser indicadores que incrementen esta sensación.