La cebolla es un vegetal que durante años se ha utilizado para sazonar alimentos. Se trata de un producto que ofrece diversos beneficios para la salud, pues posee propiedades antivirales, antifúngicas, antibacterianas, antiinflamatorias, anticancerígenas, hipoglucemiantes y antioxidantes, por lo que su consumo regular es favorable para el organismo.
Existen diversos tipos de cebolla, pero, en general, se pueden consumir de la misma forma. En ensaladas, conservas, asadas, en salsas y en sopas, entre otras preparaciones.
El portal Mejor con Salud cita datos de la Fundación Española de Nutrición, en los que indica que el principal componente de la cebolla es el agua, pues supone el 90 % de su composición. Sin embargo, en el 10 % restante se encuentran una serie de nutrientes, entre ellos: los aceites esenciales que, según la mencionada fuente, son responsables de la mayoría de las propiedades de este alimento.
También poseen vitaminas del grupo B, que son necesarias para el correcto funcionamiento del sistema nervioso e inmunológico, y vitaminas E y C, ricas en antioxidantes que ayudan a prevenir el envejecimiento celular y las enfermedades degenerativas.
Adicionalmente, contienen minerales, aminoácidos esenciales y fibra. Esta última es clave para ayudar a mejorar el sistema digestivo, favoreciendo la ingesta de nutrientes y la eliminación de desechos, señala Mejor con Salud.
Información del portal de bienestar y salud, Tua Saúde, indica que gracias a sus componentes, este vegetal brinda una serie de beneficios al organismo. Por ejemplo, ayudaría a bajar el colesterol LDL y los triglicéridos, pues contiene unas sustancias llamadas saponinas que disminuyen el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, como aterosclerosis (acumulación de placa en las arterias) o infartos.
De igual forma, según este mismo sitio web, contiene aliina y antioxidantes que promueven la relajación de los vasos sanguíneos, mejorando la circulación de la sangre, lo que ayuda a reducir la presión arterial.
De otra parte, ayuda a prevenir y a combatir enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio como la gripa, resfriados, amigdalitis, asma y alergias. La cebolla también tiene una acción expectorante, por lo que ayuda a aliviar las flemas y a mejorar la tos.
De igual forma, el consumo de cebolla cruda puede ayudar a prevenir el envejecimiento precoz, por ser rica en antioxidantes, los cuales protegen a las células del organismo del daño causado por los radicales libres.
Finalmente, otra de sus bondades para la salud es que podría ayudar a regular el azúcar en la sangre, debido a que contiene quercetina y compuestos sulfurados que poseen propiedades hipoglucemiantes, por lo que es una excelente opción para personas con prediabetes y diabetes.
Aliada de la belleza
En cuanto a belleza, un artículo publicado en la revista Glamour, de México, indica que el jugo de la cebolla es un remedio casero ideal para eliminar la caspa, a la vez que ayuda a disminuir la pérdida de cabello. En este último caso, lo único que se tiene que hacer es frotar un pedazo de la cebolla contra el cuero cabelludo.
Además, si la persona quiere tener un cabello más brillante y saludable, puede agregar esta verdura al champú y dejarlo reposar durante 15 días. Después se lava el pelo con esta mezcla para obtener los beneficios. Según la mencionada publicación, el olor de cebolla se irá una vez que el cabello esté seco.
La cebolla también puede usarse como tratamiento de belleza porque limpia la piel y retrasa el envejecimiento. Primero se extrae el jugo y luego se aplica sobre el rostro. Este es un procedimiento que se puede realizar una a dos veces por semana.
“Además de esto, algunos estudios han encontrado resultados positivos en cuanto a la colocación tópica de jugo de cebolla crudo en el cuero cabelludo, por lo que podría ayudar en el tratamiento para la caída del cabello y la alopecia”, señala el artículo de Glamour.