La cebolla es un alimento con bajo contenido energético. Tiene proteínas, potasio, vitamina C, flavonoides y distintos compuestos azufrados, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición.

“Las cebollas son fuente de potasio mineral que contribuye al funcionamiento normal de los músculos y del sistema nervioso. También es fuente de vitamina C y esta contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo. Una ración de cebolla (150g) cubre el 48 % de las ingestas recomendadas de esta vitamina para la población de estudio. Hay que tener en cuenta que esta vitamina es termosensible, por lo que su aporte de vitaminas disminuiría si la cebolla se consumiese cocinada”, señala la fundación.

Además, contiene variedad de minerales como el calcio, fósforo, magnesio, hierro, potasio, zinc, cobre, manganeso; y vitaminas del grupo B, por lo que aporta un sinfín de beneficios al cuerpo. En ese sentido, se recomienda el consumo de cebolla cruda.

No obstante, es importante señalar que la cebolla no produce ningún aumento de peso, pues para subir de peso se deben ingerir más calorías que las que se gastan en el día a día y por cada 100 gramos de cebolla, esta tiene 29 calorías.

Además, la cebolla tiene otros beneficios, según el portal Online Personal Trainer como, por ejemplo:

  • “La cebolla regulariza el funcionamiento del estómago.
  • Tiene propiedades diuréticas, por lo que es capaz de estimular al riñón para eliminar toxinas y líquidos.
  • También es un alimento depurativo, por lo que combate el estreñimiento. Además, acelera la motilidad intestinal.
  • Ayuda a reducir el colesterol en sangre.
  • Reduce los niveles de triglicéridos.
  • Inhibe la formación de trombos.
  • Contribuye en el control de la hiperglucemia.
  • Es un excelente antiparasitario”.

De igual forma, el portal de Slim citó un estudio científico del Journal of Medicinal Food en el que afirma que “la cebolla tiene la capacidad de activar la función de los riñones, así como la eliminación de líquidos en el cuerpo”.

Adicional, según el portal de salud Clikisalud.net de la Fundación Carlos Slim, la cebolla “estimula las funciones del hígado, la vesícula, el páncreas y el estómago. Adicional, neutraliza los ácidos y activa la secreción de los jugos gástricos, favoreciendo la flora intestinal”.

Además, su ingesta tiene otros beneficios, pues las personas que consumen al menos una cebolla cada semana pueden reducir la probabilidad de desarrollar cáncer en 14 %.

Sobre la misma línea, la empresa Zambon reveló que la cebolla es ideal para calmar la tos y eliminar las flemas “al ser rica en polifenoles, permite descongestionar la nariz de manera natural y es un excelente mucolítico natural”, según explicó la empresa.

Por ello, para obtener los beneficios solo se debe partir una cebolla por la mitad y esta se debe dejar toda la noche la habitación sobre la mesita de noche, para que vaya “liberando sus aromas”. “Estas sustancias, al entrar en contacto con el aire, conseguirán que la frecuencia de la tos sea menor, así como que el moco se fluidifique”, explicó la empresa.

De igual forma, según el portal especializado en belleza R.S.V.P., la cebolla le da brillo natural a la piel que la hace ver joven.

Hay que señalar que las propiedades y cualidades nutricionales de cebolla blanca y la morada son similares y en el mercado se dispone de cebollas durante todo el año. Sin embargo, su mejor época es la que transcurre durante los meses de primavera, de acuerdo con la Fundación.

Información nutricional por 100 gramos de cebolla:

  • Calorías: 29 kcal.
  • Carbohidratos: 5,1 g.
  • Fibra: 1,3 g.
  • Potasio: 278 mg.
  • Vitamina C: 19 mg.
  • Vitamina K: 170 mg.
  • Calcio: 31 mg.