Muchas personas, al levantarse, se sienten cansadas, bajas de ánimo o con poca energía. En algunos casos esto está relacionado con causas emocionales y fisiológicas.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, es posible que esta situación tenga que ver con el esfuerzo físico, el estrés emocional, el aburrimiento o la falta de sueño. También puede ser producto de preocupaciones económicas, exceso de trabajo, problemas sociales, altas responsabilidades o un duelo.
En algunos casos las deficiencias nutricionales del organismo juegan un papel importante. Puede haber una alimentación deficiente, exceso o falta de ejercicio y trastornos al dormir.
Pero independiente de cuál sea la razón, hay claves que ayudan a mejorar la condición del ánimo bajo y subir la energía. El neurocientífico, profesor de la Universidad de Harvard, Cristopher Palmer, reveló una serie de hábitos que ha aprendido en su propia experiencia personal con los que se debe acabar para conseguir más energía.
Menos carbohidratos
En una publicación del canal CNBC, el experto plantea un aspecto clave en torno a la alimentación. Aconseja bajarle a los carbohidratos, porque esto repercute directamente en el cerebro. “La dieta juega un papel en la obesidad, la diabetes y la salud del corazón, pero la mayoría de las personas no se dan cuenta de que también tiene efectos profundos en el cerebro”, asegura.
Lo ideal es el consumo regular de verduras, frutas, carne, pescado y aves. Estos alimentos, además de ayudar a mantener un peso saludable y sustancias como el colesterol y el azúcar en los niveles indicados, favorece la condición del cerebro.
Ejercicio físico
Realizar actividad física es clave para mantenerse con energía. De esta manera, Palmer recomienda entrenar durante 45 minutos, de tres a cinco veces por semana. Si bien considera que no es necesario hacer ejercicio todos los días, lo aconsejable es no pasar más de dos sin practicarlo.
Dormir bien
El sueño es otro de los aspectos clave, pues no descansar lo suficiente resulta perjudicial para la salud. La recomendación de los expertos es que los adultos duerman al menos siete horas cada noche. “La falta de sueño puede resultar en un deterioro cognitivo que podría conducir a un mayor riesgo de enfermedad de Alzheimer con el tiempo. Puede afectar el estado de ánimo y contribuir a la depresión”, advierte el experto.
Según el Instituto Europeo del Sueño, dormir bien es tan importante como alimentarse adecuadamente y de forma saludable para fortalecerse físicamente. Aunque el tiempo de sueño y su calidad dependen de las edades, restarle al menos tres horas a esta rutina es suficiente para reducir la efectividad de importantes células inmunológicas que se estimulan cuando las personas tienen sus periodos de sueño.
Salud emocional
La salud emocional es otro de los puntos a tener en cuenta para mantenerse con mayor energía. Una opción es recurrir a la psicoterapia, ya que puede, en concepto de Palmer, ayudar a las personas a comprender quiénes son y qué quieren en la vida.
Evitar el alcohol
El alcohol es uno de los hábitos que debe evitarse, pues genera diversos efectos negativos en la salud de las personas. Según Palmer, el consumo de alcohol afecta el sueño y la productividad. Si bien los especialistas recomiendan el consumo de dos copas diaria diarias en el caso de los hombres y una en las mujeres, para este experto lo mejor es cortarlo de raíz, pues asegura que genera afecciones en el cerebro.
No perder el propósito en la vida
Por último, el profesor de psiquiatría de Harvard recomienda “no perder nunca el propósito en la vida”, algo que para este investigador está programado en el cerebro de cada persona. Cuando se carece de un sentido de propósito, es posible que esto induzca a una respuesta de estrés crónico y como consecuencia a una función cognitiva deficiente.