Un grupo de investigadores se preocupó por la eficacia de los medicamentos para tratar la esquizofrenia y otros trastornos mentales. Los hallazgos fueron sorprendentes.
El informe La eficacia de los fármacos antipsicóticos se correlaciona con la modulación de las neuronas de proyección estriatal que expresan el receptor D1 en lugar de D2 realizaron por Northwestern Medicine dio a conocer los resultados de su investigación. Al hablar de medicamentos para la esquizofrenia, se hace referencia a fármacos antipsicóticos empelados para la salud mental, pero que tienen efectos negativos a la hora de consumirlos. De igual modo, los expertos señalaron que la medicina actual requiere producir medicamentos mejores sin riesgo alguno.
Para conocer los efectos de los fármacos, normalmente los laboratorios experimentan con ratones para evaluar los comportamientos que pueden haber en los humanos. Sin embargo, los expertos prefirieron emplear otro método con mayor acierto.
El estudio entonces demostró que los fármacos antipsicóticos encargado de inhibir la dopamina hiperactiva causante de la esquizofrenia, generan una reacción negativa en las conexiones neuronales. Los expertos califican esto como algo histórico y que debe estar en consideración de las empresas encargadas de producir medicamentos.
Al hablar de esquizofrenia, se hace mención a un trastorno cerebral que debilita a una de cada 100 personas alrededor del mundo. Si bien hay infinidad de medicamentos encargados de tratar esta condición médica, la investigación señaló que no es del todo positivo el tratamiento con fármacos. Si bien mejoran las alucinaciones o delirios, también pueden generar déficit cognitivo y social.
Los pacientes que padecen esquizofrenia tienden a tener niveles altamente elevados de dopamina en la región del cerebro conocida como estriado. Esta zona cuenta con dos de las principales células neuronales, las cuales son la dopamina D1 y D2.
A partir de ello, los receptores neuronales se encargan de abrir y cerrar los conductos en donde estas neuronas pasan. La dopamina es transportada tanto en D1 como en D2, pero los medicamentos de corte antipsicótico generan que el segundo puerto se bloquee.
Por lo tanto, los fármacos solamente actúan preferencialmente sobre las neuronas en el bloqueo del receptor D2. En consecuencia, el otro receptor genera efectos negativos al responder por el medicamento. Básicamente el funcionamiento se ve interferido y las neuronas se desestabilizan.
En ese orden de ideas, este estudio ha determinado que los medicamentos modulan aquella región del cerebro de un modo no recomendado, lo que quiere decir que a fin de cuentas los fármacos no son del todo eficaces como se contempla.
Jones Parker, investigador y principal autor del informe señaló lo siguiente: “Se trata de un hallazgo histórico que revisa por completo nuestra comprensión de las bases neuronales de la psicosis y traza un nuevo camino para desarrollar nuevos tratamientos contra ella. Abre nuevas opciones para desarrollar fármacos que tengan menos efectos secundarios adversos que los actuales”.
Con base a la cifras de los investigadores, a nivel mundial el 30% de los pacientes con esquizofrenia tienen riesgo de padecer complicaciones cognitivas por estos medicamentos. Los efectos entonces terminan siendo discinesia tardía, movimientos incontrolables, enfermedad de Parkinson, rigidez, temblores y lentitud en el movimiento.
“Nuestro estudio puso al descubierto nuestra falta de comprensión de cómo actúan estos fármacos y descubrió nuevas estrategias terapéuticas para desarrollar antipsicóticos más eficaces”, declaró Parker al señalar el riesgo que implica para la salubridad el hecho que los fármacos afecten la capacidad neuronal, por lo que es necesario modificar la producción y distribución de estos.