Investigadores del Instituto Sloan Kettering (Estados Unidos) han descubierto un nuevo “soldado” de células inmunitarias que podría ser un buen objetivo para la inmunoterapia contra el cáncer, según han informado a la revista ‘Nature’.

Los científicos han reconocido que este hallazgo puede mejorar la brecha entre las personas que responden al tratamiento y las que no. Las nuevas células, que los científicos han denominado células T asesinas innatas, difieren de manera notable del objetivo convencional de muchas inmunoterapias: las células T citotóxicas.

Por un lado, no se agotan por la actividad prolongada como lo hacen las células T citotóxicas y pueden penetrar más profundamente en los tejidos donde se esconde el cáncer.

“Creemos que estas células T asesinas innatas podrían ser el objetivo o modificarse genéticamente para la terapia contra el cáncer. Pueden ser mejores para alcanzar y matar tumores sólidos que las células T convencionales”, aseguró Ming Li, autor principal del estudio.

En este nuevo estudio, han utilizado una variedad de técnicas, incluido el análisis de una sola célula y la edición del genoma CRISPR, para caracterizar aún más las células.

Uno de los descubrimientos ha sido que las células T asesinas innatas no producen la molécula de punto de control inmunitario PD-1 y, como consecuencia, no parecen agotarse como lo hacen las células T asesinas típicas. Esta es una característica atractiva en una posible terapia con células inmunitarias.

“Las células también parecen reconocer diferentes marcadores, o antígenos, en las células cancerosas. Mientras que las células T asesinas convencionales reconocen antígenos mutados específicos (llamados neoantígenos), las células T asesinas de tipo innato reconocen una gama mucho más amplia de antígenos no mutados (es decir, normales)”, han explicado los investigadores.

En este nuevo estudio, han utilizado una variedad de técnicas, incluido el análisis de una sola célula y la edición del genoma CRISPR, para caracterizar aún más las células. | Foto: Getty Images

Las células T asesinas de tipo innato tampoco dependen de las células presentadoras de antígenos, como las células dendríticas, para alertarlas de la presencia de antígenos de aspecto peligroso. De esta forma, se comportan más como células inmunitarias innatas que siempre están preparadas y listas para el ataque.

Jóvenes solo necesitan una dosis de vacuna para el cáncer de cuello uterino, según la OMS

Una sola dosis contra el papilomavirus, responsable del cáncer de cuello uterino, ofrece una protección similar a dos dosis en menores de 21 años, aseguraron el lunes expertos en política de vacunación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Los diferentes cánceres de cuello uterino son casi todos provocados por una infección del papilomavirus, sexualmente transmisible. Existen vacunas desde mediados de los años 2000 contra este virus, pero hasta ahora se recomendaban dos dosis.

A la vista de los últimos datos, el comité de expertos de la OMS afirmó que una sola dosis permite proteger a las franjas de edad de entre 9-14 y 15-20 años.

Estas nuevas recomendaciones permitirían a más niñas y mujeres ser vacunadas, “manteniendo el nivel de protección necesario”, afirmó el presidente de este comité, el doctor Alejandro Cravioto en una rueda de prensa. Aunque también precisó que los planes nacionales de vacunación podrán seguir administrando dos dosis si lo consideran necesario.

Por otra parte, los expertos de la OMS siguen recomendando dos dosis con seis meses de intervalo para las mujeres de más de 21 años. “Para las personas inmunodeprimidas, sobre todo con VIH, recomendamos dos dosis, incluso tres”, destacó Cravioto.

El cáncer de cuello uterino es el cuarto que más afecta a las mujeres en todo el mundo. En 2020, la cobertura de la vacuna con dos dosis en el planeta solo llegaba al 13 % de las mujeres. Ese mismo año, este cáncer provocó la muerte de 340.000 personas.

Los diferentes cánceres de cuello uterino son casi todos provocados por una infección del papilomavirus, sexualmente transmisible. Existen vacunas desde mediados de los años 2000 contra este virus, pero hasta ahora se recomendaban dos dosis. | Foto: Getty Images

Cerca del 90 % de los nuevos casos y de las fallecidas en el mundo en 2020 se encontraban en países con ingresos medios o intermedios. “La opción de una sola dosis es más barata, consume menos recursos y es más fácil de administrar”, resumía la doctora Princess Nothemba Simelela, subdirectora general de la OMS. “Una mujer muere casi cada dos minutos por esta enfermedad”, recordó el presidente del comité de la OMS.

*Con información de Europa Press y la AFP.