La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es una sustancia blanca cristalina, muy soluble en agua. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, como es un agente antioxidante, la vitamina C puede reducir la acción perjudicial de los radicales libres.

Este nutriente también es importante para mejorar la absorción del hierro en alimentos de origen vegetal y es necesario para la formación y mantenimiento adecuado de algunos materiales del organismo como el colágeno.

La misma institución de Naciones Unidas asegura que una dosis correcta de vitamina C previene y reduce los síntomas del resfriado común. Por ello, el portal especializado Mejor con Salud listó una serie de alimentos que incluso, contienen más vitamina C que los conocidos como la naranja y el limón.

1. Grosella negra: este fruto rojo, aunque menos común, es perfecto para el verano, ya que su estacionalidad se centra en los meses de agosto y septiembre. Además, es fuente de fibra y vitamina C, siendo las negras más ricas en esta vitamina que las rojas. De hecho, una ración de grosellas cubre el 90 % de las ingestas recomendadas de esta vitamina.

2. Chile: el ingrediente activo del chile es la capsaicina, sustancia que le da esa característica picante. Además, se compone de agua, carbohidratos, fibra, proteína y vitaminas e incluye, obviamente, una buena fracción de vitamina C (aporta 144 mg por cada 100 gramos de chile consumidos).

3. Guayaba: es una de las frutas más utilizadas cuando se tiene un resfriado, porque al consumirla, se puede prevenir o combatir la gripa, gracias a todos los nutrientes que contiene como la vitamina C, la cual está cinco veces más presente que en la naranja.

4. Pimiento rojo: contiene 139 mg de ácido ascórbico por cada 100 gramos de producto, siempre y cuando se consuman crudos, puesto que el calor destruye buena parte de la vitamina C. También es fuente de minerales como potasio, magnesio, fósforo y calcio, según información del portal Salud Mapfre.

5. Perejil: el 16 % de esta planta es vitamina C. Sirve como acompañante para ensaladas y otras preparaciones. También contiene calcio, hierro, vitamina A y vitamina K.

Cabe resaltar que la gripe es una de las infecciones virales que con mayor facilidad se propaga entre la población. Cualquier contacto con partículas de saliva o secreciones de alguien infectado puede ser suficiente para desarrollarla.

Cuando una persona tiene gripe puede sentir malestar general en el organismo, dolor de cabeza, pérdida de apetito, congestión nasal, fiebre y otros síntomas que reducen la calidad de vida. Su severidad depende de la respuesta inmunológica de cada persona. Sin embargo, la mayor parte de las veces se cura en cuestión de días.

Según el portal Bienestarcolsanitas.com, algunos medicamentos pueden aliviar los síntomas de este malestar, pero nada lo cura. Algunos de los cuidados que ayudan a agilizar el proceso para que salga del cuerpo consisten en apartarse de la rutina, tomar abundante agua al clima y consumir alimentos suaves que no le exijan al cuerpo un trabajo alto de digestión.

Así mismo, los especialistas indican que el agua de panela y la miel con limón sí funcionan y aclaran que los líquidos fríos, helados de sabores y bebidas con hielo disminuyen la actividad de las defensas, paralizan el sistema inmunológico y facilitan que el virus se replique.

A pesar de lo anterior, si los síntomas persisten se debe acudir a un especialista de la salud para que examine el caso y recete el tratamiento adecuado. También, se debe consultar con un médico la introducción de un nuevo alimento a la dieta para evitar agravar afecciones preexistentes.