En el sistema digestivo suelen alojarse los parásitos intestinales, que se dan por ingerir los huevos o los quistes de estos microorganismos, que se encuentran con facilidad en la tierra, carnes crudas o superficies sucias y al estar en el intestino, se facilita su desarrollo y crecimiento.
De acuerdo con el portal Tua Saúde, esta enfermedad se da con mayor frecuencia en los niños, puesto que cuentan con un sistema inmune en fase de desarrollo y mayor contacto con el piso y la suciedad, metiéndose las manos en la boca, pudiendo ingerir los microorganismos.
Síntomas que provocan los parásitos intestinales
- Dolor abdominal constante.
- Barriga hinchada o exceso de gases.
- Cansancio frecuente sin razón aparente.
- Comezón en el ano.
- Períodos de diarrea intercalados con estreñimiento.
- Presencia de pequeños puntos blancos en las heces.
- Pérdida de peso sin razón aparente.
- Alteraciones del apetito con mucha o poca hambre.
- Heces muy oscuras.
En bebés y en los niños pueden presentarse:
- Vómitos, diarrea o cólicos.
- Falta de ganas de jugar.
- Picazón en el ano, especialmente por la noche, dificultando el sueño.
- Presencia de gusanos en el pañal, ano o heces del bebé.
- Piel amarillenta.
- Retraso en el crecimiento.
Para tratar este problema de salud es fundamental acudir al médico para determinar el tratamiento a seguir, que básicamente depende de una alimentación saludable y buenos hábitos de vida. Con respecto a los alimentos que se pueden consumir para eliminar estos microorganismos, la revista Mejor con Salud lista siete de ellos:
Semillas de calabaza
Estas semillas son uno de los más efectivos antiparasitarios que existen, pues son muy saludables por su aporte en vitamina A, ácido linoleico, hierro y zinc. “Esos nutrientes coexisten junto con la cucurbitina, un principio activo de tipo alcaloides con propiedades vermífugas que paraliza los parásitos intestinales (como la tenía o solitaria y los áscaris) y una vez inmovilizados, se desprenden de la pared intestinal y es entonces cuando es fácil expulsarlos tomando un laxante”.
Ajo
Gracias a sus compuestos azufrados, al ajo le confieren propiedades antiparasitarias y antiinflamatorias que ayudan a combatir este tipo de infecciones. Por otra parte, la alicina es un compuesto activo que destruye y facilita la expulsión de los gusanos y limpia el tubo digestivo. “Esta sustancia alimenta las bacterias saludables del intestino y, de hecho, mejora la respuesta inmunitaria del cuerpo”.
Coco
El consumo de este superalimento y sus derivados son otra forma de combatir los parásitos intestinales que crecen con facilidad en el tubo digestivo. Esta fruta tiene compuestos como antibióticos, antibacterianos y antiparasitarios que, tras ser absorbidos, alteran el ambiente que requieren los parásitos para proliferarse. Del mismo modo, son una buena alternativa para controlar las molestias digestivas, como la inflamación, el dolor y los gases.
Granada
Específicamente el jugo natural de granada podría ayudar a combatir los parásitos intestinales y promover el alivio de molestias, ya que es una fuente de antioxidantes, fibra y compuestos que estimulan la actividad de las enzimas. Esta fruta controla el crecimiento de los gusanos a la vez que promueve su eliminación.
Cúrcuma
Tiene efectos antiparasitarios y depurativos, por lo que su consumo ayuda a combatir los parásitos intestinales y facilitar la expulsión de estos organismos dañinos. Como tal, la curcumina, principal componente de este ingrediente, actúa como reguladora del pH estomacal y altera el ambiente que necesitan los gusanos para atacar y crecer sin inconvenientes. Del mismo modo, la revista Mejor con Salud detalla que también ejerce interesantes efectos a nivel digestivo. Ya que controla la hinchazón, los gases y otros síntomas asociados al desarrollo de estas infecciones.