La pérdida de memoria, suele ser una problemática habitual a medida que pasan los años, por lo que es normal que existan preocupaciones, especialmente si se debe a alguna enfermedad degenerativa como el Alzheimer.
Es por eso que se recomienda que desde jóvenes se trabaje la memoria, y cuidarla mediante un estilo de vida saludable, actividad y juegos que la mantenga activa y también tomando vitaminas y suplementos.
Asimismo, existen algunos suplementos naturales que se pueden tomar para fortalecer la memoria. En el mercado, se pueden encontrar muchos productos que se venden como estimuladores del cerebro y de la memoria, sin embargo, no siempre queda clara su composición o si está realmente demostrada su efectividad.
No obstante, existen algunos productos naturales que aportan beneficios para el cerebro, como los siguientes:
Ácido graso omega-3
Los suplementos elaborados con aceite de pescado rico en graso omega-3, también es un método interesante para prevenir el Alzheimer. Varios estudios sugieren que una mayor ingesta de ácidos grasos omega-3 de alimentos como pescado de agua fría, aceites vegetales y de nueces, está fuertemente relacionada con menor riesgo de sufrir esta enfermedad degenerativa.
Ginkgo biloba
El ginkgo biloba, es un árbol de cuyas hojas se obtiene un extracto con el que se preparan diferentes suplementos. El ginkgo es rico en flavonoides, las cuales tienen poderosas cualidades antioxidantes, y terpenoides , que ayudan a mejorar la circulación dilatando los vasos sanguíneos y reduciendo la viscosidad de las plaquetas.
Muchos de los suplementos mencionados con anterioridad y realizados con este extracto, están enfocados al tratamiento de la demencia e incluso para el tratamiento del Alzheimer.
Por ahora, no hay un estudio que compruebe que haya demostrado que el ginkgo ayude a prevenir la demencia, no obstante, sí puede mejorar los síntomas o estabilizarlos, con el fin de que no empeoren.
Por otra parte, otros estudios demuestran que existen beneficios en el estado de ánimo, el estado de alerta y la capacidad mental en personas sanas.
Acetil-L-carnitina.
Varios estudios indican que este aminoácido, podría ayudar a mejorar los problemas de memoria, debido a que mejora las funciones cognitivas, la memoria y la concentración.
Ginseng
El ginseng asiático, puede ayudar con la fatiga y mejorar funciones cerebrales con la memoria, el comportamiento y el estado de ánimo. Además, algunos estudios, indican que los componentes del ginseng, como los ginsenósidos y el compuesto K, podrían proteger el cerebro contra el daño causado por los radicales libres.
Huperzina A
Este suplemento dietético derivado de un musgo chino se empieza a usar como tratamiento potencial para la enfermedad de Alzheimer. De igual manera, la huperzina A, actúa como un inhibidor de la colinesterasa, un tipo de documento que mejora los niveles de neurotransmisores en el cerebro.
Recomendaciones para cuidar la memoria
1. Realizar actividad física, ya que es importante realizar ejercicio al menos treinta minutos diarios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
2. Mantenerse activo mentalmente, porque así como hay que ejercitar el cuerpo, hay que ejercitar la mente con actividades que estimulen el cerebro y lo mantengan en forma. Para hacerlo, la entidad recomienda hacer crucigramas, jugar bridge, tomar caminos diferentes cuando conduzca, tocar algún instrumento, entre otros.
3. Socializar regularmente, pues esto previene la depresión y el estrés, que pueden contribuir a la pérdida de la memoria.
4. Organizar las tareas diarias, ya que el escribir las citas, tareas o eventos ayudará a recordar más fácilmente. Además, Mayo Clinic, recomienda evitar las distracciones y no hacer demasiadas cosas a la vez. “Si se concentra en la información que está tratando de retener, es más probable que la recuerde más tarde. También puede ser útil relacionar lo que está tratando de retener con una de sus canciones favoritas u otro concepto familiar”, señaló.
5. Dormir bien, porque ayuda a consolidar los recuerdos de modo que se puedan recordar más adelante. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño por día.