Estar sanos depende de una cantidad inmensa de factores. Sin embargo, entre los más importantes se encuentra el de tener una alimentación balanceada. Lo que se come, lo que no se come y cuánto se come de cada cosa será clave para que el cuerpo reciba la cantidad adecuada de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales.

“Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios. Actualmente, las personas consumen más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal/sodio; por otra parte, muchas personas no comen suficientes frutas, verduras y fibra dietética, como por ejemplo cereales integrales”, indica la Organización Mundial de la Salud.

Una buena alimentación es indispensable para mejorar la circulación de la sangre. | Foto: David Malan

La institución explica que, sin importar el género o la edad, las bases de una dieta apropiada son siempre las mismas. De esta manera, a la cabeza de las sustancias recomendables, coloca a las frutas y a las verduras.

“Comer al menos 400 g, o cinco porciones de frutas y verduras al día reduce el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles (2) y ayuda a garantizar una ingesta diaria suficiente de fibra dietética”, según reseña la OMS.

Y es que estos productos de origen vegetal son mayores fuentes de muchos componentes que cualquier otro, inclusive aquellos suplementos farmacológicos o de fabricación sintética.

Gracias a estas propiedades, las frutas logran ayudar a que los diferentes órganos y sistemas del cuerpo funcionen adecuadamente, así como los procesos metabólicos tales como la circulación sanguínea.

Para que la sangre fluya de la manera oportuna, debe tener la densidad y consistencia necesaria. Además, los canales por los que corre deben estar limpios, sin nada que pueda ensuciar la importantísima sustancia.

De esta manera, una de las soluciones para que ello ocurra con normalidad es el limón, ya que es una rica fuente de vitamina C, lo que le proporciona beneficios antioxidantes y antiinflamatorios, esenciales en el recorrido sanguíneo.

Además, es una rica concentración de componentes que están involucrados en la formación de colágeno y elastina, los cuales influyen en la pared de los vasos.

Es recomendado tomar un vaso de zumo de limón cada mañana, así como acompañar la ensalada con el jugo de este fruto.

No en tanto, esta no es la única bondad del limón.

El limón es de gran ayuda para la circulación de la sangre. | Foto: Getty Images

Así se usa la cáscara de limón para tener cejas más pobladas y definidas

Las cejas son responsables de proteger los ojos de partículas, sudor e incluso radiación solar, asegura la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

Aunque la moda propone llevarlas delgadas, gruesas o semiperfiladas, entre otros esquemas de belleza según la temporada, ciertamente la AEDV explica que las cejas deben ser frondosas, ya que esto contribuye con la “armonía y equilibrio de la cara”. Incluso menciona que en la antigüedad la civilización egipcia optó por definir sus cejas con depilación, para luego pintarlas. No obstante, asegura que en la actualidad se llevan “pobladas, pero bien depiladas”.

Además, al igual que otras partes del cuerpo, se debe tener en cuenta que el vello de las cejas se cae. Por ejemplo, a diario se pierden por lo menos 100 hebras capilares, afirma la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus).

No obstante, es importante tener en cuenta que la pérdida de cabello abundante puede responder a varios factores como malnutrición, anorexia o alopecia areata.

En Pareja menciona que la combinación de aceite de coco junto con la de cáscara de limón es ideal para volver más frondosas las cejas.

La cáscara de limón tiene muchos compuestos de la pulpa de la fruta, como por ejemplo, vitamina C y ácido fólico que trabajan en la formación de colágeno colaborando con el crecimiento del cabello.

Por su parte, el aceite de coco puede restaurar las hebras capilares que gracias a nutrientes como las proteínas logran restaurar el cabello dañado, colaborando con su fortalecimiento y crecimiento, según Tua Saúde.

El zumo del limón puede traer múltiples beneficios. | Foto: Getty Images
Preparación
  1. Rallar la cáscara de 1/2 limón.
  1. En un recipiente agregar 1/2 cucharada de aceite de coco junto con la ralladura.
  1. Mezclar muy bien y aplicar en las cejas.
  1. Dejar actuar por lo menos 10 minutos para enjuagar con suficiente agua tibia.