El colágeno es una de las palabras más mencionadas en el mundo de la belleza. Es conocida por sus beneficios para la salud de la piel y por los efectos positivos que tiene para mejorar la apariencia, especialmente, del rostro.

Esta proteína es importante porque, además de estar presente en la piel, también está en las uñas, huesos, ligamentos y tendones. Cada capa de la piel tiene tejido conectivo, que está compuesto por varias capas de colágeno, para dar soporte. Asimismo, estas capas contienen fibra de elastina, las cuales brindan fuerza y elasticidad.

Green Planet Shop destaca los diferentes tipos de colágeno que existen y el uso de cada uno de ellos:

  • Colágeno tipo1: significa el 90 % de la piel, cabello, uñas, órganos, huesos y ligamentos. Este el más recomendado para la prevención de arrugas y signos del envejecimiento.
  • Colágeno tipo 2: es el que conforma los cartílagos. Según explica El Universo este es el que aconsejan los expertos para aliviar dolores o molestias en los cartílagos.
  • Colágeno tipo 3: se encuentra en los huesos, cartílagos, tendones y otros tejidos conectores. Es muy importante para mantener los órganos en un estado óptimo, indica el sitio web.

Esta proteína es importante para lucir una piel joven y sana. Además de los diferentes productos, tratamientos estéticos y opciones que ofrece el mercado, se puede contribuir a la estimulación de la producción de colágeno naturalmente. Salud 180, portal especializado en salud y cuidado personal explica cómo hacerlo.

1. Alimentación balanceada

Cuidar la alimentación es una de las principales claves para cuidar el aspecto de la piel. Una dieta balanceada, además de contribuir a la piel, beneficia a todo el cuerpo. Por esto, es relevante incluir en las comidas nutrientes que ayuden a la producción de colágeno como los aminoácidos glicina (gelatina) y prolina (huevos y lácteos).

Consumir alimentos ricos en vitamina C es otra de las formas de producir colágeno naturalmente. Algunas de estas frutas son las fresas, el kiwi, la guayaba y los cítricos. También se pueden incluir en la alimentación diaria el consumo de carnes y mariscos, que son proteínas de alta calidad.

2. Evitar exposiciones tóxicas

Para estimular la producción de colágeno se deben contrarrestar los factores que dañan la piel. Se debe evitar exponerse a los rayos ultravioleta y a contaminantes como el humo de cigarrillo, ya sea de forma directa o indirecta.

3. Dormir

Dormir al menos ocho hora es lo que ayuda a que nuestro cuerpo se recupere y se repare. Al dormir el cuerpo continúa trabajando y se concentra en la producción de colágeno.

4. Hacer ejercicio

El entrenamiento y la actividad física ayudan a que el cuerpo mejore su circulación sanguínea y que sintetice la producción de colágeno. De igual manera, estimula la producción de la hormona de crecimiento, la cual afecta de forma positiva el proceso de creación de colágeno y de elastina.

5. Realizar masajes

Las mascarillas de aloe vera son una gran ayuda para el cuidado de la piel. Aportan hidratación y reduce la aparición de arrugas faciales.

Mascarillas para ayudar a estimular la producción de colágeno

De acuerdo con el sitio web Panorama, para aprovechar las bondades del bambú se pueden ingerir infusiones de té de bambú o aplicar mascarillas faciales que contengan este ingrediente.

¿Cómo hacer la infusión de bambú?

Ingredientes

  • 1 taza de agua.
  • 1 sobre de té de bambú.
  • Jengibre rallado.

Preparación

  • Agregar un sobre de té de bambú a la taza de agua.
  • Añadir el jengibre rallado.
  • Revolver muy bien.
  • Servir y disfrutar de los beneficios de esta bebida.