El colesterol es una sustancia grasa natural presente en todas las células del cuerpo humano necesaria para el normal funcionamiento del organismo. La mayor parte de éste se produce en el hígado, aunque también se obtiene a través de algunos alimentos.
Según la compañía de salud Sanitas, esta sustancia constituye la base para la síntesis de diversas hormonas, principalmente las sexuales masculinas y femeninas. Sin embargo, que su nivel se eleve en la sangre puede generar graves complicaciones de salud, pues se asocia a un mayor riesgo de padecer cardiopatía y accidentes vasculares cerebrales. Datos de esta organización indican que siete de cada 10 personas mayores de 45 años tienen el colesterol alto.
Existen dos tipos de colesterol, conocidos como el bueno (HDL) y el malo (LDL). El primero (bueno), está compuesto por una lipoproteína de alta densidad y, el segundo, de baja densidad.
La Fundación Española del Corazón explica que el HDL encarga de recoger el colesterol no utilizado y lo devuelve al hígado para su almacenamiento o excreción al exterior a través de la bilis; mientras que el LDL lo que hace es transportar nuevo colesterol desde el hígado a todas la células del organismo.
Lo preocupante es que muchas personas ignoran que tienen cantidades elevadas ya que, por lo general, no se manifiesta mediante síntomas contundentes.
Esto puede conducir al desarrollo de trastornos de salud más graves como, por ejemplo, la arteriosclerosis, la hipertensión y la insuficiencia renal. Por esta razón es importante prestar atención a algunas señales que pueden indicar que la persona tiene este padecimiento.
1. Adormecimiento de las extremidades: la inflamación y sensación de adormecimiento de las extremidades es uno de los síntomas iniciales del colesterol alto. Esta reacción se produce porque los lípidos acumulados impiden una circulación óptima, por lo que disminuye el paso del oxígeno y los nutrientes hacia los músculos, indica el portal Mejor con Salud.
2. Halitosis: el mal aliento es una señal muy común en los pacientes que pueden estar enfrentando esta enfermedad. Dado que esta sustancia es segregada en el hígado, su acumulación excesiva dificulta la digestión, lo cual se manifiesta con sequedad y olores desagradables en la boca.
3. Estreñimiento: la acumulación de lípidos en las arterias afecta el proceso digestivo. En otras palabras, dado que la movilidad intestinal disminuye, se producen fuertes episodios de estreñimiento.
4. Afecciones cutáneas: afecciones en la piel, como la urticaria, se pueden presentar en personas que tienen colesterol alto. Con frecuencia se manifiestan a través de manchas rojizas, inflamación y una incómoda sensación de picazón que suele ser difícil de controlar.
5. Mareos y dolores de cabeza: según Mejor con Salud, a medida que el colesterol se deposita en las arterias, la circulación se ve cada vez más afectada y, por ende, la oxigenación celular se interrumpe. Esto se manifiesta mediante continuos mareos, pérdida del equilibrio y fuertes cefaleas tensionales.
6. Problemas digestivos: El exceso de lípidos en la sangre y el hígado afecta el metabolismo e impide el desarrollo del proceso digestivo de forma normal, sobre todo, al ingerir alimentos con altos contenidos de grasa. Los niveles altos de colesterol malo (LDL) y total suelen conllevar a continuos episodios de indigestión y pesadez.
Algunos de los factores de riesgo que pueden generar incremento en el colesterol, según el instituto Mayo Clinic son, entre otros, comer demasiada grasa saturada o grasas trans. Las grasas saturadas se encuentran en cortes de carne grasos y productos lácteos no descremados. Las grasas trans por lo general están en refrigerios empaquetados.
Así mismo, tener un índice de masa corporal alto aumenta el riesgo de tener colesterol elevado. La falta de ejercicio es otro factor de riesgo. La actividad física ayuda a aumentar el HDL del cuerpo, que es el colesterol “bueno”.
Fumar y beber demasiado también genera incrementos en los niveles de esta sustancia en la sangre, pudiendo causar afectaciones y complicaciones en las arterias.