El uso de base de maquillaje contribuye a mejorar la uniformidad del tono de la piel y la apariencia en general. Además, tiene la capacidad de ocultar imperfecciones, al tiempo que puede darle una textura más suave a la superficie del rostro.
Para alcanzar un cutis impecable, es esencial aplicar la base de maquillaje de manera adecuada. Aprender a aprovechar este producto en solo cinco pasos puede marcar la diferencia para que la piel del rostro luzca natural y radiante tanto en la rutina diaria como en ocasiones especiales.
Cinco pasos para fijar una base de maquillaje
De acuerdo con el portal mejorconsalud.as.com, “con el objetivo de lograr una piel impecable y suave como la porcelana, se presentarán valiosos consejos que guiarán a la persona en la limpieza y la hidratación del cutis”.
Además, se abordará el uso del corrector para disimular imperfecciones, así como la técnica de difuminar y fijar la base de maquillaje mediante la aplicación de polvos, espray y brumas.
1. Limpiar e hidratar el rostro
Antes de proceder con la aplicación de la base de maquillaje, es altamente recomendable que se siga una rutina de cuidado facial que abarque procesos de limpieza e hidratación. Esta preparación implica la utilización de diversos tipos de limpiadores, como gel, aceite o agua, seguidos de la aplicación de exfoliantes y productos hidratantes.
Es fundamental garantizar una limpieza y secado minuciosos del rostro, utilizando toallitas limpias.
Dentro de las estrategias más eficaces en el ámbito del maquillaje se encuentra la elección de bases que integren ingredientes innovadores, promoviendo una hidratación que resulta en una apariencia de piel fresca y saludable a lo largo de toda la jornada.
Asimismo, la alternativa de seleccionar bases de maquillaje que presenten un acabado luminoso o efecto de brillo puede conferir a tu aspecto un resplandor espectacular y radiante.
2. Usar corrector para cubrir algunas imperfecciones
Frente al espejo, en ocasiones nos surge la interrogante sobre cuándo es el momento adecuado para aplicar el corrector. Una opción es hacerlo previo a la base, esto ayudará a ocultar las imperfecciones y permitirá lograr una uniformidad en el tono y textura de la piel al usar la base posteriormente.
Sin embargo, también existe la alternativa de aplicarlo después de la base. Es importante tener conocimiento de las características del rostro para discernir cuál de estos enfoques beneficiará de manera más destacada.
3. Aplicar la base de maquillaje
“Cuando se realiza la elección de la base de maquillaje, resulta fundamental que la persona considere con atención su tipo y tono de piel”, así lo dio a conocer el portal mujerhoy.com.
Si la preferencia apunta hacia un acabado mate, se aconseja seleccionar una base que presente un tono natural y que no tenga efectos de reflejo de luz. Por otro lado, si el objetivo es obtener un acabado más luminoso y brillante, se recomienda optar por un producto que logre conferir a la piel un efecto resplandeciente y radiante.
4. Difuminar con brocha, esponja o dedos
El método clave para lograr una apariencia de piel de porcelana radica en la minuciosa técnica de difuminar la base de maquillaje, evitando cualquier apariencia de grietas o líneas. Este proceso se hace comenzando desde el centro del rostro hacia los bordes, mediante toques suaves que se desplazan en dirección ascendente.
Esta labor puede realizarse utilizando una brocha, los dedos o esponjas para obtener el efecto deseado.
5. Sellar la base con polvo o espray
El paso final implica fijar la base de maquillaje para garantizar su durabilidad a lo largo del día y evitar un desvanecimiento prematuro, al mismo tiempo que se matiza la textura de la piel. Existen diversas opciones de productos cosméticos diseñados para sellar el maquillaje y conseguir el efecto deseado de piel de porcelana. La elección de uno de estos productos será determinante para lograr el acabado perfecto.