La llamada Semana Santa o Semana Mayor llegó este mes de abril. Unos días de descanso en los que muchas personas aprovechan para viajar y salir de la rutina, o incluso trabajar desde otro lugar. Incluso, hay quienes los utilizan para pagar sus promesas, pues en Colombia y muchos países del mundo se profesa el catolicismo, que por estas fechas conmemora la vida, muerte y resurrección de Jesucristo.
Sin embargo, este 2023, la Semana Santa oficialmente se inicia el domingo 2 de abril con el denominado Domingo de Ramos, y culmina el domingo 9 de abril, cuando se recuerda la resurrección de Jesús.
Además de esto, se suele practicar una alimentación diferente, debido a diversas creencias que existen alrededor de esta semana, por ejemplo, dejar de de comer cares rojas, porque consumirla se relaciona con aquellos pecados como la lujuria, la ostentación o la riqueza, de acuerdo con el portal Mundo Deportivo.
Es el Jueves Santo cuando se conmemora la Institución de la Eucaristía, lo que es una representación actual de la última cena que tuvo Jesús con los doce apóstoles. La primera fecha en que especialmente se deja de consumir dicho alimento.
La segunda, es el Viernes Santo, en el que se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús en la cruz, por lo que no se consume carne. Para los católicos se trata de un día de duelo en honor al hijo de Dios. Por lo que, por respeto, los creyentes evitan las carnes rojas estos y suelen reemplazarlas por pescado.
Así las cosas, por esta fecha normalmente se consumen pescados en lugar de carnes rojas. Y esto podría ayudar a bajar de peso, porque algunos pescados “blancos magros como el bacalao, el mero y la lubina tienen un bajo contenido calórico y son muy ricas en proteínas”, registra La Cocina de Aligator. Además de generar una sensación de saciedad, por tener un bajo contenido en colesterol, exceptuando a los moluscos y crustáceos.
De acuerdo con el portal Business Insider, la proteína que aporta al cuerpo es de gran calidad y ácidos grasos omega-3, así como ayuda a proteger el corazón de enfermedades y evitar diabetes u obesidad, prevenir la depresión, mejorar el rendimiento cognitivo y a dormir mejor.
Allí destacan que es importante no mezclarlo con otros ingredientes que tengan alto contenido de grasas, o azúcares, ya que dejará de ser saludable en su totalidad. Además, citan un estudio publicado en Nutrition and Metabolic Insights demostró que consumir pescado frecuentemente “tiene un efecto positivo en el peso corporal y la función tiroidea. También reduce el riesgo de síndrome metabólico”, registra dicho sitio.
Mientras que Cope, por su parte, especifica que para adelgazar es importante consumir alimentos bajos en calorías como verduras, pescado o pollo. Y mencionan que la hinchazón puede reducirse si se disminuye el consumo de sal.
Sumado a ello, sugieren comer espárragos, calabacín o brócoli, alimentos que ayudan a limpiar el organismo.
Así como ocurre con la piña, que tiene beneficios para el organismo, pues, según un estudio de la Taif University, realizado en Arabia Saudita y publicado en la Librería Nacional de Medicina, en los pacientes participantes “el jugo de esta fruta disminuyó significativamente la insulina sérica y la leptina, mientras que aumentó la adiponectina (regula el metabolismo)”.
Además, afirmaron que el jugo de piña causó que la expresión de CPT-1 lipolítica muscular aumentara con el tratamiento con esta bebida natural.
El jugo de piña, por lo tanto, posiblemente se pueda usar como candidato contra la obesidad, ya que ayuda a disminuir la lipogénesis y aumentar la lipólisis, es decir, que evita que haya más grasa en el cuerpo.