La mayoría de los adultos desean una solución rápida cuando están enfermas, en especial cuando se trata de un resfriado común o una gripa. Así pues, tan pronto como se manifiestan los primeros síntomas, buscan remedios naturales útiles para acelerar la curación y detenerlo. Pero cuando es un niño el está resfriado se duda de su efectividad.
El resfriado es una infección viral en el tracto respiratorio superior, es decir, en la nariz y la garganta. Por lo general es una enfermedad inofensiva. Según el portal médico Mayo Clinic, son varios los virus que pueden causarlo y, las personas suelen recuperarse en una semana o 10 días.
Sufrir un resfriado o tener gripa es común en cualquier etapa de la vida. Así lo ratifica Stanley Spinner, director médico del Hospital Pediátrico de Texas, quien le dijo a The New York Times que “hay una gran cantidad de virus que pueden causar el resfriado común. Es por ello que a lo largo de nuestra vida nos contagiamos con cientos de ellos”.
Cebolla para la tos y eliminar las flemas
Hay que señalar que la cebolla es un alimento con bajo contenido energético. Tiene proteínas, potasio, vitamina C, flavonoides y distintos compuestos azufrados, así lo dio a conocer la Fundación Española de la Nutrición.
“Las cebollas son fuente de potasio mineral que contribuyen al funcionamiento normal de los músculos y del sistema nervioso. También lo son de vitamina C, lo que genera la protección de las células frente al daño oxidativo.
Una ración de cebolla (150g) cubre el 48 % de las ingestas recomendadas de esta vitamina para la población de estudio. Hay que tener en cuenta que es termosensible, por lo que su aporte disminuye si la cebolla se consumiese cocinada”, señala la fundación.
Además, contiene variedad de minerales como el calcio, fósforo, magnesio, hierro, potasio, zinc, cobre, manganeso y vitaminas del grupo B, que aportan un sinfín de beneficios al cuerpo. En ese sentido, se recomienda el consumo de cebolla cruda.
Por ello, para obtener los beneficios solo se debe partir una cebolla por la mitad y esta se debe dejar toda la noche en la habitación sobre la mesa de noche, para que vaya “liberando sus aromas”. Estas sustancias, al entrar en contacto con el aire, conseguirán que la frecuencia de la tos sea menor, así como que el moco se fluidifique”, explicó la compañía especializada Zambon.
Jarabe de cebolla y miel
Para elaborar el jarabe se requiere de tres cebollas, tres cucharadas de miel y el jugo de tres limones. Una vez listos los ingredientes, se ralla la cebolla o se pone en un procesador de alimentos y luego se retira solo el agua que esta libera. La cantidad de miel a utilizar debe ser exactamente igual a la de agua de las tres cebollas. Se mezclan estos dos ingredientes y se adiciona el jugo de los limones. Luego se pasa el jarabe a un recipiente de vidrio cerrado, dejándolo reposar durante dos horas antes de ingerirlo por primera vez.
Otra forma de prepararlo es utilizando una cebolla grande, dos cucharadas de miel y un vaso de agua. Se corta la cebolla en cuatro partes y se coloca en una olla con agua a fuego lento. Después de cocida, se deja reposar con la olla tapada durante una hora, luego se cuela el agua y se agrega la miel mezclando bien la solución. Posteriormente se guarda en un recipiente de vidrio bien cerrado.
Información nutricional por 100 gramos de cebolla:
- Calorías: 29 kcal.
- Carbohidratos: 5,1 g.
- Fibra: 1,3 g.
- Potasio: 278 mg.
- Vitamina C: 19 mg.
- Vitamina K: 170 mg.
- Calcio: 31 mg..