El hígado es uno de los órganos vitales del cuerpo y el de mayor tamaño internamente. Entre sus funciones está la digestión de los alimentos y el procesamiento y distribución de los nutrientes, por lo que es uno de los órganos vitales del cuerpo.
Las enfermedades hepáticas, como se conoce a las afecciones relacionadas con este órgano, son variadas. Además, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, también puede verse como un sistema de filtrado que ayuda a eliminar los subproductos nocivos.
Según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), existen varias cosas que afectan directamente la salud del hígado. Entre estas, el alcohol, las drogas, algunos virus y el exceso de peso.
Aunque varias de estas afecciones no suelen manifestarse externamente con frecuencia, hay algunos síntomas a los que se le puede prestar atención como alteraciones en la piel, falta de energía, trastornos digestivos, defensas bajas e incluso cambios de humor.
Debido a lo anterior es importante mantener el hígado en óptimas condiciones. De hecho, la revista especializada UnCOMO, publicada a través del portal Mundodeportivo, explicó que el ajo puede contribuir a mantener lo limpio.
Esta especia ayuda a estimular y favorecer la circulación sanguínea debido a su alto contenido de alicina y ajoeno, dos aminoácidos que tienen propiedades hipotensoras y vasodilatadoras. El portal subraya que estos beneficios ayudan a desintoxicar el hígado.
Del mismo modo anota que estos dos aminoácidos convierten el ajo en un antibiótico natural, por lo que su consumo mantiene este órgano limpio de una posible acumulación de bacterias y hongos.
Para preparar el ajo con este propósito se necesita: una cabeza de ajos, 500 mililitros de miel de romero orgánica y un envase de cristal.
1. Pelar la cabeza de ajo y cada uno de los dientes que la compongan.
2. Partir los dientes por mitades y machacarlos muy bien.
3. Surtido el proceso en mención, se vierte el ajo machacado en el recipiente y se añade poco a poco la miel orgánica, mientras se van revolviendo los ingredientes.
4. Por último, se cierra bien el frasco para dejarlo en reposo durante una semana en un lugar seco y oscuro.
5. Cumplido ese tiempo, se debe tomar una cucharada de la preparación en ayunas durante una semana.
Además del ajo, el portal especializado Healthline, ha listado otra serie de alimentos que se consideran saludables para hígado y ayudan a depurarlo:
- Café: un estudio realizado por expertos de las universidades de Southampton y Edimburgo, en Reino Unido, determinó que el consumo de esta bebida presenta un menor riesgo de desarrollar enfermedades hepáticas crónicas. “Los bebedores de café tenían un 21% menos de riesgo de enfermedad hepática crónica”, entregó como resultado la investigación.
- Aceite de oliva: la revista sobre salud unCOMO, publicada a través del portal Mundodeportivo, señala que el aceite de oliva ha ganado reconocimiento por sus aparentes beneficios para mejorar la salud del hígado, favorecer el tránsito digestivo y aportar en el cuidado del corazón.
- Pescados grasos: el salmón puede ayudar a reducir la inflamación y la acumulación de grasa en el hígado. El pescado azul también tiene un alto contenido de ácidos grasos omega-3, que son buenos para la salud del corazón y el cerebro. Los pescados grasos ayudan a reducir la inflamación y la acumulación de grasa en el hígado.
- Nueces: son un fruto seco que es bueno para la salud cardíaca. Esto se debe a que este tipo de alimentos poseen ácidos grasos insaturados y otros nutrientes. Además de mejorar la salud cardiovascular, también puede ayudar a disminuir la incidencia de las enfermedades hepáticas.