El cilantro está presente en los platos de todas partes del mundo. Se ha popularizado gracias a su gran cantidad de nutrientes, minerales y aceites como las vitaminas del grupo A, K, B, C y E, adicional a ser una fuente efectiva de calcio, potasio, magnesio y fósforo.
Además, es perfecto para darles un toque único a las comidas. Sin embargo, a la hora de reservarlo no está claro cómo hacerlo para que realmente dure y siga teniendo todas sus virtudes; en algunas ocasiones, puede jugar una mala pasada cuando se daña antes de lo esperado.
Si bien todos los alimentos se deben conservar en unas condiciones óptimas para prolongar el máximo posible su tiempo de consumo, según el diario El Español.
El magazín El Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar, señala que la preocupación por guardar y que se mantengan bien las sobras de los platos elaborados y otros alimentos en la nevera y el congelador es muy habitual, pero también es importante conservar ingredientes como las especias y las hierbas.
Métodos para conservar el cilantro
Cilantro fresco en el congelador
Congelar el cilantro es una buena opción para conservarlo más tiempo; sin embargo, hay que hacerlo correctamente para que no se estropee. Guardarlo en el congelador metido en una bolsa sellada no suele ser suficiente para que salga bien de la descongelación.
- Escaldar el cilantro para que las encimas de descomposición se mueran. Para ello, hervir agua en una olla.
- Preparar un recipiente que contenga agua con hielo.
- Cuando el agua de la olla esté hirviendo, poner el cilantro durante varios segundos.
- Secar el cilantro con papel absorbente o un paño.
- Separar las hojas y los tallos de las hierbas para que terminen de secarse y para agruparlos según la necesidad para guardar en el congelador.
- De esta manera, se podrán sacar las porciones exactas de cilantro para cada momento.
- Colocar las hojas en bolsas que cierren herméticamente y congelarlas de manera horizontal, es decir, que queden lo más sueltas posibles para que no se aplasten.
Cilantro y sal
- Desinfectar y secar esta hierba con papel absorbente.
- Picar las ramas y hojas de esta hierba y mezclarlas con sal: añadir dos cucharadas de sal por cada media taza de esta hierba.
- Colocar la mezcla en un recipiente de vidrio y, tras taparlo, guardarlo en la nevera.
- Cuando se desee utilizar la sal de cilantro, se tendrá que sustituir la sal necesaria en cualquier receta por una cantidad idéntica de esta mezcla, así se aportará la misma cantidad de sal, pero con el toque del sabor del cilantro.
Conservar cilantro con aceite de oliva
- Desinfectar, secar y cortar el cilantro en trozos pequeños, elegir un jarrón con tapa, añadir un poco de aceite de oliva y luego el cilantro.
- Después, tapar muy bien el recipiente y colocarlo en un lugar seco.
- De esta manera habrá cilantro por mucho tiempo; el aceite de oliva evitará que la planta pierda su color y olor, y lo mejor: su sabor se intensificará, según el portal especializado en el cuidado de las plantas ConservaTodo.
Conservar el cilantro en agua
- Quitar los tallos y las hojas dañadas del ramo de cilantro y lavar los que estén bien (sin restos de tierra) con agua.
- Colocar el cilantro sobre una toalla de papel o papel de cocina absorbente para que se sequen las hojas.
- Llenar un recipiente de vidrio con agua e introducir el cilantro, procurando que los tallos queden cubiertos, pero sobre todo las raíces si todavía tienen, así durará más. Las hojas deben quedar por encima del agua.
- Si se va a usar en los próximos días, se puede dejar así sobre el mesón de la cocina, pero si todavía no, es mejor guardarlo en la nevera y cambiar el agua a diario o cada dos días y, de esta forma, el cilantro se mantendrá fresco durante dos semanas.