Una de las molestias más comunes entre las personas es el dolor de espalda. Generalmente, afecta en mayor medida a la zona lumbar, lo que genera una sensación de malestar que dificulta llevar una vida normal. Según explica el portal médico Mayo Clinic, esta condición puede presentarse como dolor muscular capaz de desencadenar sensaciones de ardor o dolor agudo, incluso, en ocasiones, tiene la capacidad de propagarse por la pierna y empeorar con la ejecución de con movimientos como girar, levantar un objeto, ponerse de pie o caminar.
Para reducir el dolor de espalda existen varios tratamientos, desde lo tradicional y casero hasta la fisioterapia o medicación. Por supuesto, antes de intentar cualquiera de ellos, es importante asesorarse con un especialista para obtener un diagnóstico acertado y así establecer un plan de acción adecuado en función de cada caso específico.
Según reseña un artículo publicado en la página web de Medlineplus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, existe una creencia falsa sobre cómo tratar el dolor de espalda. Según el mito citado, se cree que cuando se padece de lumbalgia -nombre clínico para referirse al dolor en la zona inferior de la columna vertebral- es necesario suspender toda actividad física por un tiempo prolongado y descansar.
De hecho, la información de Medlineplus sostiene que los médicos no recomiendan el reposo en cama. “Si usted no tiene ningún signo de una causa grave para el dolor de espalda, (como pérdida del control de esfínteres, debilidad, pérdida de peso o fiebre) permanezca lo más activo posible”, sugiere el portal citado.
¿Cómo reducir el dolor de espalda?
Dependiendo del caso, las personas pueden realizar algunas terapias específicas para reducir la sensación de dolor en la espalda. Medlineplus publicó un listado de tratamientos que podrían contribuir a curar esta molestia. Vale la pena recordar que es importante asesorarse con un médico especialista para evaluar cuál es la mejor opción de acuerdo a las necesidades de cada paciente.
Recomendaciones para reducir el dolor de espalda:
Suspender la actividad física normal solamente durante la fase inicial: de acuerdo con el portal citado, esta medida ayuda a disminuir los síntomas del dolor de espalda durante los primeros días. Asimismo, contribuye a disminuir la inflamación en el área del dolor.
Terapias de calor o hielo: este tratamiento también ayuda a disminuir la sensación de dolor. La recomendación implica usar hielo durante las primeras 48 a 72 horas, para reducir la inflamación, y luego aplicar calor.
Medicación: en el mercado existen diferentes tipos de analgésicos para aliviar el dolor. Por supuesto, es recomendable tener el visto bueno por parte de un doctor, así como tener presente si se sufre algún tipo de hipersensibilidad o alergia a determinado medicamento.
Dormir en posición fetal: descansar en esta posición -lateral y encorvada-, con una almohada entre las piernas, contribuye a disminuir la sensación de dolor. Si la persona acostumbra a dormir boca arriba, como alternativa, puede colocar una almohada o toalla enrollada debajo de las rodillas para aliviar la presión.
No levantar objetos pesados: si la persona padece dolores de espalda, es recomendable no realizar esfuerzos importantes que requieran torcer la región lumbar, al menos, durante las primeras seis semanas después de que las molestias han aparecido.
No hacer ejercicio durante la fase inicial del dolor: durante los días inmediatamente posteriores a la aparición de dolor es recomendable evitar la actividad física. La recomendación compartida por Medlineplus implica retomar el ejercicio, lentamente, después de dos a tres semanas. Además, aconseja buscar la asesoría de un fisioterapeuta para definir cuáles son los ejercicios más apropiados.
Prevención, la mejor solución
Con el objetivo de prevenir la aparición de molestias lumbares, vale la pena resaltar cuáles son las rutinas que ayudarían conseguirlo. De acuerdo con la información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el ejercicio es un elemento clave, ya que ayuda a mejorar la postura, fortalecer la espalda y el abdomen, mejorar la flexibilidad y bajar de peso.
Sobre cuáles son los mejores ejercicios para prevenir el dolor de espalda, la respuesta de Medlineplus agrupa sesiones de actividad aeróbica como caminar, nadar o montar en bicicleta con actividades de fortalecimiento muscular. De igual modo, aconseja seguir las instrucciones de un médico o fisioterapeuta especializado que brinde orientación adecuada.
Ahora, también hay ejercicios que deberían evitarse durante la fase de recuperación, por eso, se aconseja consultar al doctor en qué momento es conveniente volver a ejecutarlos: trote deportivo, deportes de contacto, deportes de raqueta, golf, danza, levantamiento de pesas y abdominales.
Finalmente, otra de las recomendaciones de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos para prevenir el dolor de espalda implica aprender a alzar objetos y agacharse adecuadamente:
- Si un elemento es demasiado pesado, lo mejor es conseguir ayuda
- Separar los pies para tener una base de apoyo ancha
- Pararse lo más cerca posible del objeto que se va a levantar
- Agacharse con las rodillas, no con la cintura
- Apretar los músculos del estómago a medida que alce el objeto o lo descargue
- Sostener el objeto lo más cerca del cuerpo como sea posible
- Utilizar los músculos de las piernas
- Mantener la espalda recta a medida que se realiza la carga