El estado de las uñas es fundamental para muchas personas preocupadas por su estética personal. Las uñas de las manos y los pies protegen los tejidos de los dedos, por lo que son tan importantes para el cuerpo como cualquier órgano.

Aunque su apariencia no siempre representa un problema grave de salud, sí puede significar enfermedades internas o en las mismas uñas. Según Medline Plus, web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las uñas saludables suelen ser lisas y de un color uniforme.

La entidad explica que las uñas están hechas por una proteína llamada queratina, la cual, también se puede encontrar en el cabello y en la piel. Por ello, es fundamental que se mantengan fuertes y nutridas.

Una de las afecciones más incómodas tanto para mujeres como para hombres son las uñas encarnadas, las cuales, según Mayo Clinic, son un trastorno frecuente en el que un extremo superior o el costado de una uña ingresa o se incrusta en la piel.

Este padecimiento produce dolor, enrojecimiento, inflamación y, algunas veces, una infección. Por lo general, las uñas que se encarnan son las del dedo gordo del pie; la mayoría de las personas puede resolver el problema por sí sola y en pocas ocasiones se requiere de la intervención de un especialista.

El portal especializado Mejor con Salud listó una serie remedios caseros que es posible realizar cuando la uña encarnada no se ha tornado grave o no se encuentra en un problema infeccioso:

Las uñas pueden decir más del estado de salud de lo que se cree. | Foto: RUN INC | Getty Images

Jugo de cebolla

Ingredientes: media cebolla, cinco gotas de limón y un algodón.

Procedimiento:

1. En la licuadora poner media cebolla en trozos junto las gotas de limón.

2. Procesar hasta que no queden grumos.

3. Pasar a través de un colador de tela para extraer solo el líquido.

4. Aplicar el líquido en la uña encarnada con ayuda de un algodón.

5. Repetir dos veces al día.

Agua oxigenada

Ingredientes: media taza de agua oxigenada (125 ml) y un litro de agua.

Procedimiento:

1. Poner a calentar el agua y agregarle el agua oxigenada.

2. Pasar el agua a un recipiente donde quepan las extremidades en donde está la uña encarnada.

3. Sumergir la extremidad durante 20 minutos.

4. Transcurrido el tiempo, secar y usar medias.

5. Repetir el tratamiento todos los días.

Remedio con ajo

Ingredientes: un diente de ajo y una venda adhesiva.

Procedimiento:

1. Con ayuda de un mortero, triturar un diente de ajo.

2. Aplicar la pasta de ajo obtenida sobre la uña encarnada.

3. Cubrirlo con un vendaje y dejar actuar toda la noche.

4. Repetir el procedimiento cada día para notar la mejoría.

El estado de las uñas puede ser importante para quienes las incluyen en su presentación personal. | Foto: kokouu | Getty Images

Sales de Epsom

Ingredientes: un cuarto de taza de sales de Epsom (62 g) y dos litros de agua.

Procedimiento:

1. Poner a calentar agua hasta que la temperatura sea adecuada para la piel.

2. Agregar el agua a un recipiente en el que quepan los pies o la extremidad en la que esté la uña encarnada.

3. Añadir las sales de Epsom al agua y mezclar un poco.

4. Sumergir la extremidad durante 15 minutos.

5. Pasado el tiempo, secar y cubrir los pies con medias.

Vinagre de manzana

Ingredientes: un cuarto de taza de vinagre de manzana (62 ml) y un litro de agua.

Procedimiento:

1. Agregar el vinagre de manzana en un litro de agua caliente.

2. Sumergir la extremidad en la que se encuentre la uña encarnada.

3. Dejar en remojo por 20 minutos y secar.

4. Repetir el proceso cada día para ver los resultados.