La gingivitis es una enfermedad leve en la que hay irritación, inflamación y enrojecimiento de las encías que rodean la base de los dientes. Generalmente, suele desarrollarse por una mala higiene bucal. “Es importante tomar la gingivitis en serio y tratarla rápidamente. La gingivitis puede llevar a una enfermedad de las encías mucho más grave, llamada «periodontitis», y a la pérdida de dientes”, explican los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Los síntomas de encías inflamadas incluyen:

  • Encías de color rojo oscuro o violáceo.
  • Encías que sangran fácilmente cuando te cepillas los dientes o usas hilo dental.
  • Mal aliento.
  • Encías retraídas.
  • Encías sensibles.

Healthline, portal web especializado en salud, explica algunos cuidados para tener en cuenta en el hogar y contribuir a la desinflamación de las encías:

  • Cepillarse y usar hilo dental con mucha suavidad para no irritarlas.
  • Enjuagar la boca con una mezcla de agua y sal para eliminar las bacterias.
  • Tomar agua frecuentemente, para estimular la producción de saliva.
  • Evitar el uso de enjuagues bucales fuertes.
  • Evitar fumar o ingerir alcohol, los cuales pueden causar irritación.
  • Poner una compresa tibia sobre el rostro para aliviar el dolor y una fría para disminuir la inflamación.

Buenos hábitos para una boca sana

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica algunas medidas para evitar tener una higiene oral adecuada:

  • Utilizar cepillos eléctricos, ya que son mejor que los manuales.
  • Usar hilo dental al menos una vez al día. Es importante utilizarlo suavemente para no afectar las encías. Su uso ayuda a la prevención de la enfermedad periodontal.
  • Visitar al odontólogo al menos cada seis meses, para realizarse limpieza profunda de los dientes y examen oral, para conocer el estado de los dientes.
  • Se pueden hacer gárgaras con enjuague bucal para identificar las áreas donde hay acumulación de sarro.
  • Es importante evitar el consumo de comidas y bebidas azucaradas y comida chatarra. En caso de comer en horas de la noche, hay que cepillarse posteriormente. Medline Plus destaca que no se debe comer ni beber, excepto agua, después de cepillarse los dientes, al momento de dormir.

Bruxismo

Rechinar, crujir o apretar los dientes es conocido como bruxismo. Este es un trastorno inconsciente en la mayoría de los pacientes. Es frecuente en los niños “debido a que los diente les crecen con cierta rapidez y mientras se recoloca la dentición pueden rozar y causar el molesto ruido característico. Sin embargo, si el problema persiste en la infancia o bien durante la edad adulta, puede llegar a causar problemas graves”, explica el portal de la entidad de salud Sanitas.

A continuación, en palabras de Mayo Clinic, algunos de los síntomas del bruxismo:

  • Rechinar o apretar los dientes, con un sonido que puede ser tan fuerte como para despertar a la persona que duerma contigo.
  • Dientes aplanados, fracturados, partidos o flojos.
  • Esmalte dental desgastado, por lo que se ven las capas más profundas de los dientes.
  • Mayor dolor o sensibilidad dental.
  • Músculos de la mandíbula cansados o rígidos, o mandíbula trabada que no se puede abrir o cerrar por completo.
  • Dolor o inflamación de mandíbula, cuello o rostro.
  • Dolor similar al dolor de oído, pero que no es un problema del oído en realidad.
  • Dolor de cabeza sordo que comienza en las sienes.
  • Lastimaduras por morder la parte interna de la mejilla.
  • Alteración del sueño.