Las arterias de las piernas pueden bloquearse y causar dolor, molestia, o pesadez. Estos síntomas pueden empeorar al caminar y convertirse en un obstáculo para el desarrollo de la actividades cotidianas.
“Usted posiblemente no necesite este procedimiento si todavía puede realizar la mayoría de las actividades cotidianas. El proveedor de atención médica puede pedirle probar primero con medicamentos y otros tratamientos”, explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Cuando los síntomas persisten y no mejoran con el tratamiento, se debe consultar nuevamente al doctor para saber qué se debe hacer. En caso de tener úlceras o heridas en la pierna que no mejoran, infección, gangrena o dolor intenso (aun estando en reposo) también se debe consultar al médico, el cual puede recomendar una angioplastia.
En este procedimiento quirúrgico, el cirujano utiliza un globo para dilatar las arterias bloqueadas, el cual funciona de la siguiente forma: “el globo ejerce presión contra la pared interior de la arteria para abrir espacio y mejorar el flujo de sangre. Para impedir que la arteria se estreche de nuevo, a menudo se coloca un stent (malla de metal) a lo largo de la pared arterial”, detalla la Biblioteca.
Asimismo, el médico utiliza un estent para el procedimiento. Este instrumento permite que la arteria esté abierta y se evite nuevamente el bloqueo.
“La angioplastia a menudo se combina con la colocación de un pequeño tubo de malla de alambre llamado estent. El estent ayuda a mantener la arteria abierta, lo que disminuye la posibilidad de que se vuelva a estrechar. La mayoría de los estents están recubiertos con medicamentos que ayudan a mantener la arteria abierta (estents liberadores de fármacos). En raras ocasiones, se usan estents de metal sin revestimiento”, indican los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación”.
Es importante que, luego de haber tenido este procedimiento, se sigan rigurosamente todas las instrucciones brindadas por el cirujano para evitar complicaciones de salud. Como toda cirugía, existen algunos riesgos que se pueden presentar. Algunos de estos incluyen:
- Reacción alérgica al fármaco usado en el stent que libera medicamento dentro del cuerpo.
- Reacción alérgica al medio de contraste de las radiografías.
- Sangrado o coagulación en el área donde se colocó el catéter.
- Coágulo de sangre en las piernas o los pulmones.
- Daño a un vaso sanguíneo.
- Daño a un nervio que podría causar dolor o entumecimiento en la pierna.
- Daño a una arteria en la ingle, lo cual podría requerir una cirugía urgente.
- Ataque cardíaco.
- Infección en la incisión quirúrgica.
- Insuficiencia renal (el riesgo más alto en las personas que ya tienen los problemas renales).
- Perdida de la extremidad.l stent..
- Accidente cerebrovascular (esto es poco frecuente).
- No se abre la arteria afectada.
- Perdida de la extremidad
Arterias obstruidas y el corazón
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) señalan que la aterosclerosis ocurre paulatinamente mientras el colesterol, grasa y otras sustancias de la sangre forman placa. Luego de que se acumule, ocurre un estrechamiento de las arterias.
Cuando las arterias están obstruidas, se puede desarrollar la enfermedad de las arterias coronarias. En esta afección, los vasos sanguíneos que le suministran sangre al corazón tienen problemas para enviar suficiente sangre y oxígeno a los músculos cardíacos.
De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, las placas de colesterol son uno de los principales factores que causa esta enfermedad. Los síntomas pueden presentarse décadas después que la enfermedad se haya desarrollado. Estos incluyen:
- Dolor en el pecho.
- Falta de aire.
- Fatiga.
- Ataque cardíaco.
Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, señala los síntomas de un infarto (ataque cardíaco):
- El dolor torácico (el síntoma más común).
- Dolor en una sola parte del cuerpo o que se irradia desde el pecho a los brazos, hombro, cuello, dientes, mandíbula, área abdominal o la espalda.
- El dolor puede presentarse de forma intensa o leve y puede sentirse como si fuera una indigestión intensa, una presión fuerte o una banda apretada alrededor del pecho.
- El dolor suele tener una duración de más de 20 minutos.
- Otros síntomas que también pueden presentarse durante un ataque cardíaco son: ansiedad, tos, desmayos, mareo, vértigo, náuseas y vómitos, palpitaciones fuertes, dificultad para respirar y sudoración.
- En algunos casos una persona puede sufrir un ataque cardíaco y no presentar síntomas. Esto es conocido como “ataque cardíaco silencioso”.