La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune, la cual puede causar molestias, inflamación, dolores articulares y un daño muy fuerte en casi todo el cuerpo. Sin embargo, las zonas más comunes de afectación son las manos, las muñecas y los pies.
Según el portal Medline Plus, esta enfermedad suele comenzar en la edad mediana y es más común entre los adultos de la tercera edad. Cualquier persona puede padecer la enfermedad por un corto período o los síntomas pueden aparecer y desaparecer. Los síntomas más severos pueden durar un periodo de tiempo más largo.
Por lo general, los síntomas más comunes que se presentan cuando una persona sufre de artritis en las muñecas son:
- Dolor con el movimiento o cuando estás en reposo.
- Inflamación de la articulación.
- Rigidez de la articulación.
- Deformidad de la articulación.
- Debilidad y pérdida de la masa muscular.
- Pérdida de la función articular y muscular.
Esta enfermedad es el resultado de un problema con el sistema inmunitario —que ayuda a combatir las infecciones—, pero que en este caso ataca por error las células del revestimiento de la articulación, lo que provoca que se inflamen, se pongan muy rígidas y generen dolor.
Actualmente, no existe cura para la artritis, pero el tratamiento adecuado y el ejercicio moderado pueden ayudar a reducir los brotes, indica Medical News Today. Si este padecimiento no se trata, el cartílago, los huesos y las articulaciones podrían afectarse de manera permanente.
Por otro lado, el portal Mayo Clinic afirma que alrededor del 40 % de las personas que padecen artritis reumatoide también presenta signos y síntomas que no implican las articulaciones. Las zonas que pueden estar afectadas son:
- Piel
- Ojos
- Pulmones
- Corazón
- Riñones
- Glándulas salivales
- Tejido nervioso
- Médula ósea
- Vasos sanguíneos
Los signos y los síntomas de la artritis reumatoide pueden variar en intensidad. Además, en muchos casos estos síntomas no se sienten, incluso pueden llegar a desaparecer en cuestión de minutos. Por esta razón, los brotes de la misma se alternan entre períodos de tiempo.
Señales tempranas
Algunas de las señales de advertencia temprana se relacionan con lo que siente una persona en general, mientras que otras son específicas de las articulaciones.
Detectar estas señales de advertencia puede ayudar a las personas a buscar un tratamiento más efectivo. Las primeras señales de alerta de la AR son:
Fatiga
Antes de experimentar cualquier otro síntoma, una persona puede sentirse extremadamente cansada y sin energía.
La sensación de fatiga puede afectar:
- Las actividades cotidianas.
- Las relaciones.
- El deseo sexual.
- La productividad en el trabajo.
Sentirse fatigado puede deberse a la reacción del cuerpo por la inflamación de las articulaciones.
Rigidez
La rigidez puede ocurrir en una o dos articulaciones en los dedos. Este tipo de rigidez suele afectar a una persona después de haber estado quieta durante mucho tiempo. Por eso, este síntoma es la causa de la rigidez matutina.
Sensibilidad articular
La sensibilidad en las articulaciones afecta las manos y los pies.
En las manos, se puede sentir sensibilidad al presionar la articulación en el medio y en la base de los dedos o durante el movimiento. En los pies produce el mismo efecto.
Fiebre leve
La inflamación asociada con esta enfermedad, puede hacer que las personas se sientan mal y desarrollen fiebre; además, pueden tener una temperatura un poco elevada, la cual a veces se acompaña de fatiga.
Enrojecimiento de las articulaciones
La inflamación en las articulaciones puede darles una apariencia enrojecida.
El enrojecimiento ocurre porque la inflamación hace que los vasos sanguíneos de la piel circundante se ensanchen, además, los vasos más anchos permiten que fluya más sangre hacia esta área, lo que le da a la piel una apariencia enrojecida.