El sueño es un complejo proceso biológico que ayuda a procesar información nueva, a mantener saludable el cuerpo y a sentir descanso del día a día, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos explicó que al dormir, se atraviesa un ciclo de dos fases del sueño: el movimiento ocular rápido (MOR) y el sueño sin MOR, que tiene tres etapas, definidas por las mediciones de la actividad cerebral obtenidas en los estudios sobre el sueño.

  • Etapa 2: Al llegar a la etapa 2, está dormido.
  • Etapa 3: Esta etapa se llama sueño profundo o sueño de ondas lentas, por un patrón específico que aparece en las mediciones de la actividad cerebral. Por lo general, se pasa más tiempo en esta etapa al inicio de la noche.

Así las cosas, para obtener un pleno descanso existen suplementos naturales que ayudan a conciliar el sueño como, por ejemplo:

  • Melatonina: La ingesta de melatonina a corto plazo parece acortar el tiempo que tardan en conciliar el sueño las personas con insomnio.
  • Lavanda: Es una planta medicinal que puede ser usada para tratar padecimientos de ansiedad, depresión, mala digestión o incluso la picadura de insectos en la piel, debido a sus propiedades relajantes, calmantes, antiespasmódicas, analgésicas y antidepresivas.
  • Valeriana: Es una planta medicinal que ha sido utilizada hace años por sus propiedades calmantes, sedantes y relajantes, pero la valeriana no se debe utilizar en niños menores de tres años, mujeres embarazadas o en período de lactancia.
  • Amapola de California: es ligeramente hipnótica y alivia el dolor de cabeza asociado al jet lag y los dolores musculares o neurálgicos.
  • Manzanilla: Es una planta originaria de Europa, se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y sedantes, entre otras.
  • Pasiflora: Es una planta con un gran poder sedante. Además, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha reconocido sus propiedades ansiolíticas, sedantes e hipnóticas.
  • Magnesio: Es un nutriente que el cuerpo necesita para mantenerse sano y es importante para muchos procesos que realiza el cuerpo, como, por ejemplo, regula la función de los músculos y el sistema nervioso, los niveles de azúcar en la sangre y la presión sanguínea.

Por su parte, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, enumeró algunos consejos para dormir mejor, por ejemplo:

  • Respetar los horarios de sueño: ser consistente del horario de acostarse y de levantarse todos los días, incluso los fines de semana.
  • Mantenerse activo: la actividad habitual ayuda a promover las buenas noches de sueño. Establecer un horario para hacer ejercicios por lo menos algunas horas antes de acostarte y evitar las actividades estimulantes antes de la hora de dormir.
  • Evitar o limitar la cafeína y el alcohol, y no consumir nicotina: todas estas sustancias pueden hacer que sea más difícil conciliar el sueño, y sus efectos pueden durar varias horas.
  • Evitar las comidas abundantes y las bebidas antes de acostarse: un tentempié liviano es suficiente y puede ayudar a evitar la acidez estomacal. Beber menos líquido antes de acostarse para no orinar con tanta frecuencia.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica, por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.