Los parásitos son seres vivos que vienen de otras especies. Se pueden contraer cuando se consumen alimentos o agua contaminada y también por medio de la picadura de un insecto o contacto sexual. Algunas enfermedades parasitarias son más fáciles de tratar que otras, según explica el portal de salud y medicina Medline Plus.
Estos microorganismos varían de tamaño, los hay muy pequeños, unicelulares, y se denominan protozoarios, mientras que los más grandes pueden llegar a alcanzar el tamaño y la forma de un gusano. Por ejemplo, el suministro de agua contaminada puede causar infecciones por Giardias, mientras que los gatos pueden transmitir toxoplasmosis, parásito peligroso para mujeres embarazadas.
No existen vacunas para prevenir las enfermedades parasitarias, la mejor prevención es consumir agua potable cuando se viaja o visita determinados lugares. Hasta el momento, existen algunos medicamentos que ayudan a tratar los síntomas que se derivan de estas patologías.
El portal de salud, belleza y cuidado personal Mejor con Salud menciona que los parásitos más comunes son los que afectan al intestino ocasionando dolor abdominal, diarrea, náuseas y hasta desnutrición; es por esto que el portal brinda algunos alimentos que pueden ayudar a combatir estos microorganismos. Antes de hacer uso de estos productos se recomienda consultar con un médico especialista.
Ajo
El ajo es un potente antimicrobiano. Gracias a sus propiedades antibióticas y antihelmínticas naturales, puede ayudar a mantener bajo control a los parásitos y a las bacterias, por lo que es importante involucrarlo en la dieta.
- La forma más barata y eficaz es comerse un par de dientes de ajo crudos en ayunas.
- Si es difícil tolerar su sabor u olor, se pueden encontrar cápsulas de ajo en cualquier herbolario o tienda naturista.
- También se pueden condimentar las comidas con este alimento.
Nuez negra
Esta planta tiene propiedades antimicrobianas. Su extracto se emplea como planta medicinal antibiótica y antiparasitaria. Se puede tomar en modo de infusión para los parásitos intestinales, pero también aplicarla sobre la piel para tratar enfermedades parasitarias cutáneas como la sarna.
Ajenjo o hierba santa
Esta hierba de sabor amargo se usa con fines medicinales desde la antigüedad para tratar, sobre todo, síntomas digestivos:
- Indigestión y flatulencia.
- Falta de apetito.
- Problemas de hígado y vesícula.
- Ictericia.
- Halitosis.
Para consumir ajenjo basta con triturar la planta seca hasta hacerla polvo y tomar un gramo al día endulzado con un poco de miel. También se pueden disolver tres gotas de aceite esencial en un vaso de agua o tomarlo en cápsulas.
Clavo de olor
El clavo de olor es usado como antiséptico y antimicrobiano desde la antigüedad. Es una planta medicinal conocida por su eficacia para combatir parásitos y larvas intestinales. Una manera de consumirlo es triturarlo hasta conseguir un polvo fino y tomar una pequeña cantidad dos veces al día por un lapso de tres días para que tenga un efecto mayor. También se puede agregar una pequeña cantidad del polvo en determinadas recetas o tomarlo en polvo, diluido en un vaso de agua tibia.
Tomillo
El tomillo ayuda a eliminar los parásitos intestinales e inhibe el crecimiento de los que sobreviven. También ayuda al proceso digestivo y antiespasmódico, lo que puede mejorar algunos de los síntomas que aparecen tras una infección por parásitos. Este producto viene en diferentes presentaciones, como planta seca para preparar infusiones, en cápsulas y en aceite esencial.
Cúrcuma
La cúrcuma es una raíz medicinal utilizada en la medicina tradicional para tratar múltiples infecciones. Un estudio publicado en la revista Experimental Parasitology demostró la utilidad de esta especie en el tratamiento de parásitos intestinales. La planta fue capaz de inhibir múltiples enzimas de un parásito llamado Fasciola gigantica, induciendo su muerte.