Diciembre es uno de los meses más esperados por las personas. La celebración de la Navidad y del Año Nuevo trae consigo el uso de las luces de colores, los adornos y el uso de juegos pirotécnicos para adornar el cielo. Aunque el uso responsable de la pólvora no afecte a las personas, tiene efectos negativos en las mascotas, al punto de ser mortal.
Los perros y los gatos tienen una capacidad de escucha muy fuerte, debido a que tienen un oído fino y muy sensible. Es por esto que pueden captar los ruidos y sonidos, incluso si son muy leves, de forma rápida. Según explica Pettys, sitio web especializado en mascotas, cuando estos animales escuchan sonidos fuertes como truenos, golpes o detonaciones de pólvora se asustan, pues su capacidad auditiva se ve alterada. “Los perros y gatos pueden soportar una intensidad sonora de 85 decibeles y el estallido de la pólvora puede llegar hasta 200 decibeles”, explica el portal.
Cuando las mascotas se asustan por estos ruidos, pueden estresarse, agitarse, temblar y aumentar sus palpitaciones, ya que la intensidad del sonido los afecta directamente. Esto puede ser mortal, debido a que al incrementar su ritmo cardíaco pueden morir de un infarto. “Después de una explosión intensa, los animales pueden quedar con síntomas de estrés postraumático y esto lesiona su bienestar físico y emocional”, menciona el Instituto de Protección y Bienestar Animal de Bogotá.
Los expertos destacan que cuando hay detonaciones de pólvora muchos animales silvestres, especialmente las aves, huyen y pierden el sentido de la orientación, olvidando los nidos y alterando el cuidado de los polluelos. En algunos casos, muchas de ellas mueren al estrellarse contra ventanas y diferentes objetos.
Sobre esa misma línea es común, según los expertos, que los animales de compañía salgan huyendo y se pierdan debido a la sobreexcitación y las sensaciones de perturbación en la localización. Otros se tiran por los balcones o son atropellados por vehículos, mientras algunos sufren traumatismos severos en los sentidos visuales y auditivos, especialmente.
Algunos de los síntomas que presentan las mascotas son salivación excesiva, ansiedad, pérdida de apetito, orinar o defecar. Para evitar que los animales estén en peligro y no se se vean afectados por la pólvora, a continuación, Carolina Alaguna, médica veterinaria y etóloga, especialista en comportamiento animal del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal, brinda algunas recomendaciones para tener en cuenta ante situaciones de uso de pólvora:
- Sitio seguro: se debe crear un espacio en el que las mascotas se sientan seguras, como una cama, mueble, caja con juguetes y snacks. Al momento de que el animal tenga miedo, este espacio lo hará sentir cómodo y tranquilo.
- Música: para disminuir los efectos agresivos de las detonaciones por la pólvora se recomienda poner sonidos o música relajante para ayudar a calmarlos, como la música clásica o melodías suaves. También se deben cerrar las puertas y ventanas para disminuir la frecuencia del sonido de las explosiones.
- Aceites esenciales: deben ser 100 % naturales. Se pueden preparar en casa, con aceite de lavanda y mezclarlo con aceite de coco. Para aplicarlo, se recomienda utilizar un difusor o splash y realizar pasajes suaves en la mascota.
- Snacks: existen algunos nutacéuticos que se encuentran en algunos alimentos para relajar y calmar, especialmente a los perros. “Muchos contienen precursores de la serotonina, neurotransmisor importante para la regulación de las emociones y muy útil en este tipo de casos, debe suministrarse bajo previa prescripción de un médico veterinario etólogo”, enfatiza la experta.
- Chalecos: para los perros existen chalecos antiansiedad. Esta puede ser una alternativa en caso de exposición a sonidos de pólvora.