Mantener la flora intestinal bajo control es fundamental para prevenir que el intestino permanezca hinchado o bloqueado y afecte el funcionamiento del resto de su cuerpo, incluso generando enfermedades, por lo que muchos expertos coinciden en que la alimentación debe ser la base para que cualquier persona pueda fortalecer su salud.

Los yogures con probióticos, por ejemplo, son bebidas que brindan beneficios para el funcionamiento del intestino debido a que ayudan a mejorar la digestión y protegen la flora intestinal, como explica la periodista y redactora en temas de salud Beatriz G. Portalatín, en un artículo publicado en el diario digital El Español de España.

Yogur (getty) | Foto: Andrew Unangst

Sin embargo, expertos advierten que la gran mayoría de los yogures que se venden en los supermercados contienen más azúcar de la recomendada para el consumo humano por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por esa razón, una buena alternativa es consumir yogur griego, pues tiene una menor cantidad de azúcar añadida y un mayor contenido de proteínas y grasa.

“Se ha observado recientemente (y el hallazgo se repite de un estudio a otro con pertinencia) que el consumo de yogur se asocia a un menor riesgo de obesidad central”, agrega Miguel Ángel Martínez-González, epidemiólogo y catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, en su libro Salud a ciencia cierta (Planeta).

“El consumo de yogur o lignanos parece tener efectos beneficiosos sobre la salud humana, pero el consumo de ambos mostró una mayor mejora en algunos parámetros de salud cardiovascular”, agrega un estudio publicado en 2016 por el Centro Nacional para la Información Biotecnológica de Estados Unidos.

Los yogures naturales enteros (que no tengan edulcorantes) y los yogures naturales desnatados también son recomendados, aunque los expertos recomiendan que cada persona debería consultar primero con un especialista en nutrición para diseñar su dieta de acuerdo con las características específicas de su organismo.

Un colorido pasillo de supermercado sin gente, pero con abundancia de comida. | Foto: Copyright by Tom Werner

Vegetales, frutas y fibra

Las alcachofas, la achicoria, la lechuga, el estragón o el salsifí, así como los puerros, chalotes, cebollas, ajo y espárragos, son particularmente beneficiosos para la microbiota del intestino.

Tim Spector, profesor de Epidemiología Genética en el King’s College de Londres y director del proyecto British Gut, explica que ingerir vegetales es fundamental para alimentar adecuadamente a las bacterias intestinales.

También es aconsejable seguir una dieta rica en fibra. Por ejemplo, se recomienda consumir frutas, verduras, legumbres, frutos secos y cereales integrales que alimentan a las bacterias de nuestro intestino de forma saludable.

Por otra parte, María José Alonso Osorio, vocal de plantas medicinales y homeopatía del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona y colaboradora de Advance Medical, destaca en el blog Salud Mapfre algunas ideas para que las personas mejoren la digestión y tengan un tránsito intestinal adecuado.

En primer lugar, recomienda que se debe masticar muy bien y no ingerir las porciones completas sino que se debe tomar el tiempo debido para ingerir cada uno de los alimentos, triturarlos con los dientes y digerirlos. Mediante el proceso de la masticación se digieren los azúcares y se facilita la acción de los jugos gástricos sobre los alimentos al preparar el bolo de comida para ser digerido.

Si masticar bien es fundamental, ingerir pequeñas porciones también lo es. Por eso se aconseja evitar poner grandes porciones de comida en la boca para que el bolo no resulte demasiado grande y difícil de tragar. Estos dos consejos y comer con tranquilidad ayudarán a que no haya mala digestión, se evite la formación de gases y la acidez.

Finalmente, la experta también recomienda limitar la ingesta de sal, esto ayudará a reducir la retención de líquidos, previniendo la sensación de hinchazón.