Lavar los platos es quizá una de las tareas que más se postergan en el hogar y ni hablar de la limpieza de las ollas. Además, retirar la grasa de los implementos de la cocina no suele ser tarea fácil si no se cuenta con un buen jabón para lograrlo: poco a poco se va acumulando en los rincones y en los bordes tanto del interior como del exterior de los sartenes y ollas una capa de mugre difícil de retirar.
Si bien la alternativa más fácil puede ser botar las ollas y reemplazarlas por un nuevo juego, hay diversos productos en el hogar que pueden ayudar a limpiarlos, sin la necesidad de deshacerse de ellos.
El bicarbonato de sodio es considerado el ingrediente estrella en el hogar: sirve para limpiar los baños, eliminar olores, blanquear la ropa e incluso eliminar la grasa de los diferentes elementos de la cocina. Se obtiene al combinar moléculas de carbono, sodio, hidrógeno y oxígeno, cuya fórmula es NaHCO3 y también es conocido como bicarbonato de soda, sal de vichy, hidrógeno carbonato de sodio y carbonato ácido de soda. Es de color blanco y textura cristalina, proveniente de un mineral conocido como natrón.
Este compuesto es soluble al ser mezclado con agua, produciendo una reacción que libera dióxido de carbono, lo que lo convierte en un ingrediente bastante efectivo para neutralizar ácidos.
El primer uso que se le puede dar al bicarbonato de sodio para eliminar la grasa de los implementos de la cocina es mojar la cacerola o el sartén para luego cubrir todas la partes afectadas con bicarbonato de sodio. Una vez se haya cubierto por completo, se rocían unas gotas de vinagre y se deja actuar durante 15 minutos. Cumplido el tiempo en mención, se frota la olla con la ayuda de una esponja de aluminio, poco a poco empezará a caer la grasa pegada en el implemento.
Hay ocasiones en las que se puede quemar el fondo de la olla o el sartén, un problema que también puede ser solucionado con la ayuda del bicarbonato de sodio. El primer paso es poner a hervir agua en el sartén que está quemado, para ablandar la grasa que esté pegada, se deja en el fuego durante 10 minutos. Luego, se bota el agua y se cubre la zona quemada con bicarbonato de sodio disuelto en dos cucharadas de vinagre blanco para dejarlo actuar durante otros 10 minutos.
Cuando se cumpla el tiempo indicado, se toma medio limón y se refriega el sartén, para luego lavarlo con agua y jabón. En caso tal de que la quemadura esté muy pegada, se debe repetir el proceso hasta lograr el objetivo.
Otro ingrediente que de seguro hay en el hogar y que ayuda a remover la quemadura de la olla es la sal. Se deben verter dos cucharadas de sal en el recipiente que se va a limpiar y se agrega la cantidad de agua que sea suficiente para cubrir la zona afectada. Cumplido este paso, se prende el fuego y se deja ahí hasta que el líquido llegue al punto de ebullición, para luego retirarlo de la estufa.
Se deja reposar durante cinco minutos y luego, con la ayuda de un utensilio de cocina de madera se comienza a frotar hasta remover la parte quemada. También se puede emplear una esponja de aluminio.
Además de los recursos ya descritos, también se pueden poner a hervir agua con tres cucharadas de jabón lavaloza a temperatura baja en la olla que se haya quemado para ayudar a despegar los residuos.