Una señal de que el hígado está saturado de grasa es sentir fatiga, una molestia o dolor en el abdomen, exactamente en la parte superior derecha. Algo de hinchazón en las palmas de las manos o los pies rojos, color amarillento en la piel y en los ojos, metabolismo lento, trastornos digestivos, defensas bajas e incluso cambios de humor, según la Clínica Mayo.

El hígado ayuda a digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas, de acuerdo con MedlinePlus, web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Por ello, si se experimentan algunos de los síntomas anteriores puede ser un grito de auxilio que emite este órgano. En la mayoría de oportunidades lo mejor es realizar un proceso de limpieza.

Hay quienes prefieren usar métodos farmacéuticos y otros que por lo contrario se inclinan más por lo natural. Para los segundos una opción es el boldo, una planta tipo arbusto utilizada de manera medicinal por las comunidades indígenas pero que se encuentra con facilidad en supermercados y tiendas naturistas. Según Salud Mapfre, la forma más frecuente de tomar el boldo es en infusión, pero también se encuentra en polvo, capsulas, jarabe o extracto hidroalcohólico.

Lo aconsejable es que un especialista indique cuál es la mejor manera de consumirlo y la dosis para no excederse en el tratamiento. Sobre todo, descartar de ante mano que los problemas del hígado son solamente que está graso y no que presente otras complicaciones.

La manera más común y práctica de consumirla

Lo aconsejable es comprar las hojas secas de boldo. Poner a hervir agua y una vez esté en el punto de ebullición añadirle la hierba. Dejarla que hierva a fuego medio durante unos 15 minutos, dejar la aromática reposar, tapada por cinco minutos. Luego, recomiendan en el portal Mundo Deportivo, en su sección de salud, colar la bebida y aún estando tibia tomarla. Si la quieren endulzar recomiendan hacerlo con productos naturales como Stevia o miel de abejas.

De esta preparación según especialistas en medicina alternativa es recomendable tomar dos tazas al día. Y antes de cualquier alimento, es decir en ayunas y la segunda taza, después de la cena.

¿Qué propiedades tiene el boldo?

Coleréticas: Ayuda a estabilizar la vesícula y el hígado, debido a que genera la producción natural de bilis, y como resultado favorece la digestión.

Colagogas: Evita que se obstruya la vesícula biliar, eliminando toxinas, barro y cálculos biliares.

Antiinflamatorias: Un hígado graso inflama los tejidos blandos y el boldo por sus propiedades lo desinflama como consecuencia de la limpieza que realiza en el organismo.

Estos son los alimentos prohibidos para quienes padecen de hígado graso, según Vidae:

Azúcar: cuando se consume este producto con regularidad alta, se producirán grasas que se depositarán en el hígado y causarán inflamación.

Alcohol: este tipo de bebidas siempre serán el enemigo número uno de las enfermedades hepáticas. Esto se debe a que al metabolizarse e ingresar al organismo, provoca un aumento de triglicéridos generando sustancias que dañan las células del hígado.

Carne roja: las grasas saturadas que contiene la carne favorecen al desarrollo de hígado graso. Se recomienda el consumo moderado y la priorización de carne blanca como pollo o pescado.

Sal: este producto puede ocasionar retención de líquidos, lo que en ocasiones hace que las personas aumenten de peso y, por lo tanto, se obliga al hígado a trabajar más de lo normal afectándolo en gran medida.

Lácteos: ciertos productos lácteos, como los quesos muy madurados, llevan una alta cantidad de sodio, algo que no beneficia a cuidar el hígado en absoluto. Se recomienda que, si se consumen estos productos, sean 0 % grasa, es decir, que no sean derivados de leche entera.

Embutidos: son restos de carnes rojas junto con grasa, que por lo general están mezclados con los desperdicios de la industria cárnica. El exceso en el consumo de estos alimentos puede causar problemas al sistema digestivo y en el hígado.