El envejecimiento repercute en las neuronas, pero una alta reserva cognitiva puede ayudar a contrarrestar el efecto. Cabe mencionar que la reserva cognitiva no actúa como un antídoto a la hora de prevenir enfermedades cerebrales ni tampoco evita el envejecimiento neuronal, pero sí contribuye a retrasar el posible deterioro cognitivo.
Hasta el momento no existe una actividad concreta que ayude a evitar enfermedades como la demencia o el Alzheimer, pero sí una serie de prácticas que pueden ayudar a mantener el cerebro activo.
Hay que tener presente que el cerebro y las funciones cognitivas funcionan en red y, por eso, para mejorar en una función determinada, hay que trabajarlas todas en conjunto. Por ejemplo, para mejorar la memoria, también hay que estimular la atención. El portal web de la Fundación Pasqual Maragall recomienda algunas actividades que ayudarán a aumentar la reserva cognitiva.
- Leer: es una de las actividades más recomendadas, debido a que ayuda a favorecer la estimulación cognitiva. Esta actividad también aporta conocimientos, favorece la concentración, ejercita la memoria y nutre la imaginación.
- Jugar: los juegos de mesa son un actividad para compartir con la familia o amigos, divertirse un rato y salir de la rutina. Estos juegos son una buena herramienta para entrenar distintas actividades cognitivas. Depende del juego, pero algunos ayudan a estimular el cálculo, la memoria a corto plazo, la lógica, la capacidad de planeación, el vocabulario, la creatividad, entre otras capacidades.
- Aprender: aprender nuevas cosas sin importar la edad, ayuda a la buena salud del cerebro. Aprender un nuevo idioma, tocar un instrumento musical, aprender a cocinar, entre otros favorecen la actividad cognitiva.
- Ponerse a prueba: resolver crucigramas o sudokus, son un buen ejercicio a la hora de ejercitar la mente. Cabe mencionar, que las actividades que ya se realizan de manera sencilla o mecánica no ayudarán mucho. La idea es practicar actividades que reten a pensar.
- Cambiar las rutinas: añadir nuevas tareas o variar las habituales contribuye a crear nuevas conexiones neuronales. Algunos ejemplos: se puede elegir otra ruta para ir al trabajo, cambiar la organización de los cajones del closet, o comer con la mano contraria.
Otros consejos para mantener un cerebro saludable
- Seguir una dieta sana y equilibrada. Consumir, como mínimo, cinco porciones de fruta al día, tomar entre 8 a 10 vasos de agua al día. Mantener una dieta libre de grasas saturadas, sal y azúcar, en exceso.
- Controlar la hipertensión: es conveniente realizar chequeos periódicos, especialmente cuando esta elevada.
- Abandonar el tabaco: si se quiere tener un cerebro sano es mejor evitar fumar y si se hace, dejar de hacerlo.
- Vigilar la obesidad, el colesterol y la diabetes: es recomendable seguir una dieta equilibrada y realizar las revisiones médicas pertinentes.
- Hacer actividad física todos los días: se recomienda hacer algún tipo de actividad durante al menos 30 minutos diarios.
- Cuida tu bienestar emocional: si se padece de algún trastorno o enfermedad mental/ emocional, se recomienda asistir a los controles médicos. Incluso es saludable ir al psicólogo como mínimo una vez en el año, así no se padezca de ninguna afección.
- Mantener la actividad intelectual: como leer, hacer actividades que pongan en funcionamiento el cerebro como, pensar, imaginar, resolver, entre otras.
- Cultivar las relaciones: es necesarios salir de la casa, distraerse y compartir con amigos y seres queridos.