Cuando se habla de circulación sanguínea, se hace referencia al flujo o movimiento de la sangre a través de todo el cuerpo. La sangre transporta oxígeno, nutrientes y otras sustancias desde el corazón a través de los vasos sanguíneos al resto de las células, tejidos y órganos, así lo dio a conocer el Instituto Nacional del Cáncer.
Una mala circulación se presenta casi siempre en las piernas y esto se debe a que las venas no cuentan con la capacidad de retornar la sangre hacia el corazón; por ende, el líquido rojo se empieza acumular, generando agotamiento y cansancio en la zona. Este padecimiento se puede complicar, causando acumulación de sangre en las mismas, lo que hace que se vean protuberancias en las venas, por ende ante la presencia de los primeros síntomas se recomienda consultar con un profesional de la salud para evitar futuras complicaciones.
Entre los síntomas de una mala circulación se destacan la sensación de hormigueo y entumecimiento, la sensación de frío, los calambres musculares y la hinchazón en la zona afectada, en este cado las piernas.
Los expertos aseguran que para lograr el óptimo cuidado de la salud cardiovascular es esencial mantener un consumo de sodio bajo, por lo que es necesario evitar la sal y, en su lugar, optar por sazonar las comidas con hierbas aromáticas u otros ingredientes.
Por fortuna, existe la posibilidad de mejorar la circulación de las piernas a través del cambio de los hábitos alimenticios y la actividad física. Por supuesto, no hay que dejar de lado las indicaciones de los profesionales de la salud.
Más allá de seguir un tratamiento recomendado por los especialistas en el tema, existen algunos recursos y acciones naturales que ayudan a que este tipo de afecciones en la salud para alivianar. El portal Mundo Deportivo citó algunas de ellas, recopiladas de unCOMO, que tienen mucho que ver con seguir un estilo de vida saludable.
- No estar sentado por mucho tiempo: permanecer sentado por largos períodos de tiempo puede causar problemas en la circulación en las piernas. Ahora bien, si el trabajo requiere que la persona esté sentada, es muy importante poner en práctica las pausas activas y tomar descansos regulares para moverse y estirarse.
- Ejercicio frecuente: allí es crucial realizar ejercicio de manera regular, ya que esta es una de las mejores maneras de mejorar la circulación en las piernas. Ante esto se recomienda romper con el sedentarismo y hacer actividades como caminar, nadar, montar bicicleta durante 30 o 45 minutos al día. Evite hacer ejercicios de alto impacto.
- Elevar las piernas: aunque parezca algo sencillo y poco útil, elevar las piernas por unos cuantos minutos ayuda a que se facilite el proceso de circulación sanguínea y hará que la sangre fluya hacia el corazón, con lo que la acumulación de presión y líquidos en las piernas se reduzcan.
- Masajearse las piernas: después de una larga jornada y antes de dormir, un masaje en las extremidades es vital para aliviar la sensación de pesadez. El paso a paso es iniciar de arriba a abajo, luego rodearlas con las manos, apretar en las zonas de mayor tensión y finalmente mojar los pies y gemelos en agua fría.
- Evitar el calor directo en los pies: ante la baja de temperaturas, existe la tendencia de buscar métodos para mantener calientes los pies, pero hay que tener en cuenta que el efecto vasodilatador del calor puede dificultar la circulación venosa. Además, si sufre de mala circulación en las piernas, la depilación con cera caliente debe ser eliminada de la rutina de belleza.
- Usar medias de compresión: entre las medidas para prevenir o tratar tanto las flebitis, como las varices, incipientes o avanzadas, o las trombosis, las medias de compresión son una de las más eficaces. Tal y como explica Rodrigo Rial, presidente del Capítulo Español de Flebología y Linfología de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular, “las trombosis venosas superficiales son más frecuentes en las personas que tienen varices, por lo que el tratamiento con medias elásticas previene su aparición. Todo el mundo con una trombosis venosa, sea profunda o superficial, se va a beneficiar del tratamiento con medias de compresión una vez que ya ha aparecido la trombosis”.
- No usar ropa ajustada: evite el uso de ropa muy ceñida, pues esto hace que la circulación no fluya de manera natural, por lo que se esfuerza al organismo para hacer mejor la circulación de la sangre.
- Peso saludable: tener un exceso de peso en el cuerpo puede generar presión adicional sobre las piernas y pies, por lo que la circulación se verá afectada y se dificultará. Un peso controlado no solo ayudará al buen flujo de la sangre en las piernas, sino en todo el organismo.
Cabe recordar que la información suministrada en el contenido anterior no sustituye la asesoría médica y lo mejor que puede es hacer consultar a un experto de la salud.