Es común que el envejecimiento implique cierto grado de problemas de memoria, así como una ligera disminución de otras habilidades de razonamiento, según Mayo Clinic.
Sin embargo, hay una diferencia entre los cambios normales en la memoria y la pérdida de memoria asociada con la enfermedad de Alzheimer y los trastornos relacionados.
Por tal razón, la entidad sin ánimo de lucro hizo algunas recomendaciones para mejorar la memoria.
1. Realiza actividad física, ya que es importante realizar ejercicio al menos 30 minutos diarios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), pues esto aumenta el flujo sanguíneo al cuerpo entero, incluso al cerebro y ayuda a mantener la memoria activa.
Además, las personas con un nivel insuficiente de actividad física tienen un riesgo de muerte entre un 20 % y un 30 % mayor en comparación con las personas que alcanzan un nivel suficiente de actividad física.
2. Mantenerse activo mentalmente, porque así como hay que ejercitar el cuerpo, hay que ejercitar la mente con actividades que estimulen el cerebro y lo mantengan en forma. Para hacerlo, la entidad recomienda hacer crucigramas, jugar bridge, tomar caminos diferentes cuando conduzca, tocar algún instrumento, entre otros.
3. Socializar regularmente, pues esto previene la depresión y el estrés, que pueden contribuir a la pérdida de la memoria.
4. Organizar, ya que el escribir las citas, tareas o eventos ayudará a recordar más fácilmente. Además, Mayo Clinic, recomienda evitar las distracciones y no hacer demasiadas cosas a la vez. “Si se concentra en la información que está tratando de retener, es más probable que la recuerde más tarde. También puede ser útil relacionar lo que está tratando de retener con una de sus canciones favoritas u otro concepto familiar”, señaló.
5. Dormir bien, porque esto ayuda a consolidar los recuerdos de modo que se puedan recordar más adelante. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño por día.
6. Seguir una alimentación balanceada, ya que esto es bueno para el cerebro y para el corazón. La entidad recomienda comer frutas, verduras y granos integrales, elegir fuentes de proteína bajas en grasa, como pescado, frijoles y carne de pollo sin piel. Asimismo, señaló que el alcohol puede causar confusión y pérdida de memoria, al igual que el consumo de drogas.
Otros alimentos recomendados son: mango, uvas, plátano, peras, huevos, legumbres como las lentejas, frutos secos como los anacardos, acelgas, espinacas, lácteos, entre otros.
De igual forma, los nutricionistas recomiendan mezclar alimentos de distintos colores, porque así la persona asegura que toma diferentes tipos de nutrientes. Cuantos más colores haya, más nutrientes va a tener un plato y si son frescos aún mejor.
Sin embargo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios. Por eso, es importante consultar a un experto para que lo guíe.
7. Controlar las afecciones crónicas, como depresión, presión arterial alta, colesterol alto, diabetes, obesidad y pérdida de la audición, ya que, según la entidad, cuanto mejor se cuide, mejor será su memoria.
8. Ir al médico, pues este le puede realizar un examen físico y también le revise la memoria y sus habilidades para resolver problemas. Además, es importante revisar regularmente los medicamentos con el doctor, porque varios medicamentos pueden afectar la memoria.
Por su parte, tenga en cuenta que si le está preocupando la pérdida de memoria, especialmente si esto afecta su capacidad para realizar sus actividades diarias o si nota que su memoria empeora, hable con su médico.