La diferencia entre los triglicéridos y el colesterol es que los triglicéridos almacenan las calorías no utilizadas y proporcionan energía al cuerpo, mientras que el colesterol se utiliza para construir células y ciertas hormonas, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Sin embargo, aunque son diferentes tipos de lípidos que circulan en la sangre, las recomendaciones para tenerlos en niveles adecuados son similares, y entre ellas está el evitar el azúcar y los carbohidratos refinados, aumentar la ingesta de fibra, tener una alimentación saludable y balanceada, entre otros.
Por su parte, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que el azúcar en la sangre, también llamada glucosa, proviene de los alimentos que se consumen y es la principal fuente de energía; pero cuando el metabolismo de la insulina no funciona correctamente, las células de los tejidos dejan de asimilar la glucosa como deberían y esta se acumula en la sangre.
Una cantidad excesiva de glucosa en la sangre podría ser un signo de un problema médico serio llamado hiperglucemia, el cual puede ser un signo de diabetes, de acuerdo con el Grupo Sanitas de España.
Dicho lo anterior, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que el té de cebolla es ideal para tratar las tres afecciones, “pues contiene unas sustancias llamadas saponinas que disminuyen el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, como aterosclerosis o infartos”.
Adicional, “debido a que contiene quercetina y compuestos sulfurados que poseen propiedades hipoglucemiantes, por lo que es una excelente opción para personas con prediabetes y diabetes”.
De otro lado, hay que señalar que las propiedades y cualidades nutricionales de cebolla blanca y la morada son similares, y en el mercado se dispone de cebollas durante todo el año. Sin embargo, su mejor época es la que transcurre durante los meses de primavera, de acuerdo con la fundación.
Información nutricional por 100 gramos de cebolla
- Energía: 20 kcals
- Proteínas: 1,6 g
- Grasas: 0,2 g
- Carbohidratos: 3,1 g
- Fibra: 1,3 g
- Vitamina E: 0,3 mg
- Vitamina B1: 0,13 mg
- Vitamina B2: 0,01 mg
- Vitamina B3: 0,6 mg
- Vitamina B6: 0,2 mg
- Folatos: 17 mcg
- Vitamina C: 8 mg
- Calcio: 31 mg
- Magnesio: 12 mg
- Fósforo: 30 mg
- Potasio: 210 mg
- Hierro: 0,5 mg
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, hay otros hábitos saludables que reducen el colesterol, los triglicéridos y el azúcar, por ejemplo:
- Tener una dieta saludable: esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día, menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
- Beber agua: el consumo diario de agua es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general la mayoría de los hombres necesita aproximadamente 13 tazas de líquido al día y la mayoría de las mujeres necesita aproximadamente nueve.
- Hacer ejercicio: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad.