Los riñones filtran los desechos y el exceso de agua de la sangre, lo que se vuelve orina, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados.
También eliminan el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen un equilibrio saludable de agua, sales y minerales (como sodio, calcio, fósforo y potasio) en la sangre, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón (que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos).
Asimismo, explicó que sin este equilibrio, es posible que los nervios, los músculos y otros tejidos en el cuerpo no funcionen normalmente.
Además, los riñones producen hormonas que ayudan a:
- Producir glóbulos rojos.
- Mantener los huesos fuertes y saludables.
“La mayoría de las enfermedades renales ataca los nefrones. Este daño causa que los riñones no puedan eliminar desechos. Las causas incluyen problemas genéticos, lesiones o medicamentos, y la persona puede correr mayor riesgo de padecer una enfermedad renal si tiene diabetes, presión alta, enfermedad cardíaca o un familiar cercano con algún problema de los riñones. La enfermedad renal crónica va dañando los nefrones de a poco con el transcurso del tiempo”, explica la biblioteca en su página web.
Otras enfermedades de los riñones pueden incluir: cáncer, quistes, piedras o infecciones y, para detectar si hay una enfermedad renal, el médico debe hacer pruebas de sangre y orina. Los síntomas se desarrollan muy tarde y por lo general aparecen cuando los riñones fallan completamente, que es cuando el médico debe ordenar un trasplante renal o un tratamiento con diálisis para reemplazar la función que normalmente desempeñan los riñones.
Por esta razón, consumir alimentos que ayuden a limpiar los riñones es una buena decisión si de evitar afectaciones futuras se trata y, el portal Mejor con Salud reveló que la albahaca es ideal para este fin y solo se debe mezclar en un vaso de agua cinco hojas de salvia fresca, diez hojas de albahaca fresca y si se dese endulzar se agrega una cucharada de miel.
No obstante, este no es el único beneficio de la albahaca, pues adicional, mejora la digestión, previene infartos y aterosclerosis, trata heridas y picaduras de insectos, ayuda en la pérdida de peso, alivia la migraña, trata aftas, dolor de garganta y amigdalitis, ayuda a regular el azúcar en la sangre.
De todos modos, la planta también tiene contraindicaciones, pues el portal reseñó que el efecto secundario de la albahaca incluye reacciones alérgicas, y está contraindicado en altas dosis durante el embarazo, en niños con menos de dos años y durante el período de lactancia materna.
Por su parte, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, la albahaca, perteneciente a la familia de las mentas, tiene un aroma picante, levemente dulce y hay muchos tipos de albahaca, cada una con su propio sabor e intensidad.
Por ello, la albahaca se puede llevar a la mesa de diferentes formas, por ejemplo, para sazonar platos italianos con base de tomate, salsas y aderezos, pero la albahaca también combina bien con ajo y aceitunas. De igual forma, se usa mucho en la cocina tailandesa y la albahaca se usa también para sazonar carnes, pescados, pasta, rellenos, sopas y vegetales.
Información nutricional de 100 g de albahaca
- Energía: 48 kcal
- Lípidos: 0,8 g
- Carbohidratos: 5,1 g
- Proteínas: 3,1 g
- Fibras: 3,9 g
- Vitamina A: 660 mcg
- Carotenos: 3950 mcg
- Ácido fólico: 110 mcg
- Potasio: 300 mg
- Calcio: 250 mg
- Fósforo: 37 mg
De todos modos, antes de consumir el alimento, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.