El colágeno es una de las sustancias más importantes para el cuerpo, pues se trata de una proteína estructural que permanece en el cuerpo humano en grandes cantidades debido a que contribuye al buen funcionamiento de huesos, dientes, músculos, piel, articulaciones y algunos tejidos conectivos.
Además, el cuerpo produce esta sustancia a partir de la combinación de aminoácidos, que son nutrientes que están contenidos en los alimentos ricos en proteínas, junto con otros elementos como la vitamina C, el zinc y el cobre.
Asimismo, según la doctora Lorea Bagazgoitia, en su libro Lo que dice la ciencia sobre el cuidado de la piel, a medida que el tiempo avanza, el organismo disminuye la producción de colágeno, generando efectos colaterales en la piel, como la disminución del brillo e hidratación natural.
Por tal razón, es importante consumir alimentos que ayuden con la producción de esa proteína y el portal Soy Aire recomendó la gelatina sin sabor y para prepararla se necesitan cinco gramos de gelatina sin sabor y 1/4 de taza de agua fría. En seguida, se deben mezclar los dos ingredientes hasta que se vuelva una mezcla espesa y justo en ese momento es cuando se debe consumir y preferiblemente en ayunas.
Asimismo, el colágeno se encuentra en numerosos alimentos y consumirlos favorece que el desgaste natural que sufre esta sustancia en el organismo sea más lento. Entre el tipo de alimentos que contienen colágeno destacan los ácidos grasos, concretamente omega 3, 6 y 9, que ayudan a que las hormonas se regulen, interviniendo en el proceso de producción del colágeno. Estos ácidos están presentes en alimentos como los frutos secos y el salmón.
Otros alimentos que son recomendados para mejorar la producción son: huevos, verduras, carnes rojas, pollo; cítricos (pomelos/toronjas), bayas (frambuesas, arándanos y moras), frutas tropicales (mango, kiwi, piña y guayaba), ajo, hojas verdes (espinaca, col rizada, acelgas, brócoli y demás verduras de ensalada) y tomates.
No obstante, hay otros alimentos que no contribuyen a mantener un buen nivel de colágeno, como el exceso de azúcar y los carbohidratos refinados, que pueden causar inflamación en el organismo y deteriorar el colágeno en el cuerpo, lo que también se ve reflejado en un deterioro en el estado de la piel, los huesos y los músculos.
Por ende, se recomienda tener una dieta baja en azúcares y harinas refinadas, porque comer pan, galletas, caramelos, jugos artificiales, entre otros productos, contribuye al aumento de la glucosa en la sangre y el exceso de azúcar se engancha a algunas proteínas (elastina y colágeno entre ellas). Lo anterior hace que estas proteínas se vuelvan rígidas y las endurece, por un proceso denominado glicación.
Asimismo, otros factores importantes para la producción natural de colágeno son:
- Dormir de manera reparadora: dormir lo suficiente permite estimular la melatonina, la hormona relacionada con el sueño que tiene un poder antioxidante y antiinflamatorio. Además, dormir al menos siete horas incrementa la hormona del crecimiento.
- Actividad física y dieta saludable: combinar estos dos aspectos es fundamental para mantener una buena producción de colágeno que contribuya al óptimo funcionamiento del sistema óseo y muscular, entre otros.
Adicional, otra forma de aumentar el colágeno es con suplementos y ese se llama colágeno hidrolizado. “Este colágeno hidrolizado se obtiene principalmente de hueso y cartílago bovino. Es especialmente útil para promover la producción de colágeno en el cuerpo, ayudando a fortalecer las articulaciones, uñas y cabello”, explicó el portal Muy Saludable del Grupo Sanitas de España.
Asimismo, indicó que el principal beneficio que ofrece el colágeno hidrolizado es la mejora en la firmeza e hidratación en la piel.
Consumirlo tiene algunos beneficios, según el portal especializado Healthline:
- Mejora la firmeza y la elasticidad de la piel.
- Fortalece las uñas y el cabello, lo que mejora su aspecto.
- Previene y mitiga los síntomas de la osteoporosis.
- Previene y retarda la aparición de arrugas, líneas de expresión y celulitis.
- Tonifica articulaciones, tendones y ligamentos.
- Controla la presión arterial.
- Previene la aparición de úlceras gástricas.
- Disminuye y evita el surgimiento de estrías.