Una de las sustancias que es buena, pero también puede ser poco beneficiosa para el organismo, es el colesterol, un lípido o grasa que se encuentra en la mayoría de las células que conforman al cuerpo.
Cuando los niveles de colesterol aumentan progresivamente, traen efectos negativos a la salud de las personas, así que mantener en equilibrio esta grasa es algo que contribuye al buen funcionamiento de los diferentes sistemas humanos.
La revista digital Mejor con Salud explica que el colesterol no solo está presente en el organismo, también alimentos como la carne, huevos, quesos, entre otros tienen este lípido. En ocasiones, el consumo exagerado de varios productos eleva el nivel de grasa al punto en el que se acumula y causa enfermedades.
El mismo portal web especifica que el exceso de colesterol en la sangre, junto a otras sustancias grasas, puede causar una placa de lípidos que se pega a las paredes de los vasos sanguíneos. Además, dice que hay que aprender a distinguir entre las grasas saludables y las que no lo son, pues, estas últimas, son las responsables de acumularse en el cuerpo tras una alimentación con gran presencia de grasas trans o saturadas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) comparte que el colesterol es un problema mal controlado. Por lo tanto, adoptar nuevos hábitos de vida podría contrarrestar el riesgo de padecer esta infección: “La introducción de pequeños cambios en el modo de vida, como renunciar al tabaco, practicar una actividad física de forma regular y tomar alimentos sanos, puede ayudar a prevenir las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares”, dice la doctora y especialista internacional Shanthi Mendis.
Uno de los cambios de alimentación para tratar los niveles de colesterol se puede dar con el consumo de verduras como la calabaza y el ajo. Mejor con Salud menciona que la calabaza es una hortaliza que actúa en contra de las grasas malas ya que tiene propiedades depurativas, es decir, elimina toxinas y sustancias poco efectivas para el buen funcionamiento del cuerpo.
Por otro lado, también está el ajo, alimento que tiene como base la alicina considerada como un vasodilatador que reduce la tensión arterial. En ese sentido, alimentos como la calabaza y el ajo son útiles, pero al agruparse se complementan y actúan eficazmente en el organismo. Una opción para preparar estos productos naturales, según la revista de buenos hábitos y salud, es en forma de puré y su realización puede ser tan sencilla como hacer una limonada.
Receta de puré de calabaza y ajo
Ingredientes: tres dientes de ajo, tres vasos de agua (750 ml) y un pedazo de calabaza (800 g).
Preparación:
- Agregar el agua a una olla y ponerla a hervir a fuego alto.
- Cortar la calabaza en trozos medianos, para ello, se deben retirar las semillas del vegetal y conservar la piel.
- En otra olla poner a hervir los trozos de calabaza con agua, esta debe cubrir todo el alimento.
- Cuando esté blanda la calabaza, retirar el agua y pelar su cáscara. Luego de esto, se debe triturar hasta obtener una mezcla en forma de puré, es decir, homogénea y un poco espesa.
- Para finalizar, tomar los dientes de ajo y cortarlos en diminutos trozos, luego de ser lavados, agregarlos al puré de calabaza.
El citado portal recomienda llevar a cabo esta receta para ser consumida en dos porciones por día. El puré de calabaza y ajo puede ser un acompañante perfecto para el almuerzo e incluso la cena.
No obstante, antes de ingerir cualquier alimento se recomienda consultar con médicos y nutriólogos sobre la efectividad del consumo de calabaza y ajo.