Los riñones eliminan los desperdicios de la sangre y el exceso de agua (en forma de orina) y ayudan a mantener el equilibrio de sustancias químicas (como sodio, potasio y calcio) en el cuerpo, de acuerdo con el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos.
Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que dentro de cada riñón hay un millón de estructuras pequeñas llamados nefrones.
No obstante, la mayoría de las enfermedades renales atacan los nefrones y este daño causa que los riñones no puedan eliminar desechos.
Por su parte, la biblioteca explicó que el hígado es el órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo y ayuda al organismo a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas.
Por ello, es de vital importancia cuidar estos dos órganos y para limpiarlos naturalmente, según Crear Salud, un proyecto sin ánimo de lucro de Fundación Facilísimo, hay que empezar por el hígado y se debe:
“1. Disminuir el consumo de alimentos de origen animal, exceptuando carnes blancas y pescado blanco.
2. Evitar las grasas saturadas, el azúcar refinado y el alcohol.
3. Consumir cúrcuma. “Los compuestos de la cúrcuma, llamados curcuminoides (la curcumina, la demetoxicurcumina y la bisdemetoxicurcumina), le otorgan grandes propiedades medicinales a esta especia. Sus aceites volátiles (turmerone, atlantone y zingiberene), proteínas, resinas y azúcares, también contribuyen a su poder sanador. Además, para completar su perfil de ‘reina de las especias’, también contiene fibra dietética, vitaminas C, E y K, niacina, sodio, calcio, potasio, cobre, magnesio, hierro y zinc”, señaló el grupo Sanitas en España.
4. Consumir alcachofas”, ya que aporta agua, fibras y flavonoides, además de contener buenas cantidades de vitamina C y minerales, como el potasio y el fósforo, según el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde.
En seguida, para limpiar los riñones hay que:
1. Tomar agua. El consumo diario de agua es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general la mayoría de los hombres necesita aproximadamente 13 tazas de líquido al día y la mayoría de las mujeres necesita cerca de nueve. Sin embargo, el consumo de agua puede variar dependiendo de las actividades que se realicen día a día. Por ejemplo, si la persona hace ejercicio debe consumir más agua, para cubrir la pérdida de líquidos. Asimismo, si el clima es cálido y se suda más, es recomendable aumentar la ingesta de agua, o si una mujer está embarazada, es posible que necesite más líquidos.
2. Tener una dieta rica en vegetales.
3. Consumir zumos de arándanos con granada.
4. Incluir alimentos que optimicen la función renal como los plátanos, los pepinos, el perejil, los berros, la calabaza y la alga espirulina.
Ahora bien, lo ideal es seguir las recomendaciones por dos o tres semanas, pero existen otras sugerencias que ayudan a cuidar los órganos como, por ejemplo:
- Dormir: Los adultos deben dormir de siete a ocho horas por noche.
- Dejar de fumar: Usar tabaco por mucho tiempo puede incrementar el riesgo para desarrollar muchos problemas de salud.
- Evitar el consumo del alcohol, pero si se bebe, es mejor hacerlo con moderación, lo que quiere decir beber no es intoxicarse (o embriagarse) y que no se consuma más de un trago al día si se es una mujer y no más de dos tragos si se es un hombre. Un trago se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y, por ello, lo primero que se debe hacer es consultar a un experto de la salud, para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.