En el mundo de la belleza se utiliza una gran diversidad de productos e instrumentos que son de uso de otras áreas. Uno de ellos es el papel aluminio. Además de ser un elemento para cocina, guardar alimentos o empacar comidas, también es protagonista en el cuidado del cabello.
El papel aluminio es utilizado para algunos peinados, especialmente en los que se utiliza calor. Es un instrumento de gran uso debido a que:
- Es aislante y ayuda a conservar los productos, evitando que se combinen con otras sustancias.
- Mantiene el calor. Esto es importante para que los productos hagan un mayor efecto.
- Es resistente y práctico, por lo que se puede utilizar varias veces.
- Ayuda a dividir el cabello por secciones y así aplicar diferentes productos. Por eso es utilizado en la aplicación de tintes.
¿Cómo rizar el cabello con papel aluminio?
Panorama explica cómo aprovechar este material para rizar el cabello y lucir unas ondas perfectas.
- Desenredar el cabello. Es importante tratarlo con suavidad para evitar dañarlo.
- Dividir el cabello en cuatro secciones: dos laterales, frontal y posterior.
- Tomar un mechón y cubrir el cabello con un trozo de papel aluminio.
- Cuando se llegue a la punta, enrollar el cabello y poner una moña pequeña.
- Repetir el mismo procedimiento en las otras secciones.
- Al día siguiente, retirar el papel aluminio.
- Cepillar el cabello.
¿Cómo cuidar el pelo?
Para muchas personas, el cabello es considerado como una de las partes más importantes de su cuerpo. Por eso, hay quienes están pendientes a su estado y regularmente le aplican productos o tratamientos para que luzca bien.
Vogue explica que una de las creencias populares más conocidas sobre los productos de cuidado capilar es el cambio de shampoo para “no acostumbrar al cabello”.
María Castán, experta científica global de Wella (marca especializado en cuidado capilar) le contó a la revista lo que opina respecto a esto. “La verdad es que no hay evidencia científica que pruebe esta creencia. Si hablamos desde un punto de vista biológico, el pelo (la fibra capilar) no tiene vida, por eso, no duele cuando lo cortamos, y es por esta razón por la que no es posible que se acostumbre a algo. Es sólo la percepción de cómo el cabello responde a un producto conocido o a uno nuevo”, detalló la experta.
Otra de las recomendaciones de Vogue es la elección adecuada de los instrumentos para el cuidado del cabello. Para desenredar el pelo es importante utilizar un cepillo que tenga dientes anchos. “Comienza a peinar las puntas y ve subiendo hacia las raíces”, explica. “Reserva el cepillo (mucho mejor si es de cerdas naturales) para cuando el cabello esté completamente seco”, explica Philip B, estilista de grandes estrellas de Hollywood.
Finalmente, la revista también explicó un aspecto importante al momento de bañarse: la temperatura del agua. Señaló que popularmente se ha escuchado que lo más adecuado para el cabello es realizar el último lavado con agua fría. Esto se debe a que a esta temperatura, estimula circulación sanguínea y cierra la cutícula. Respecto a eso, Rafael Artero, experto de Pantene destaca que lo saludable es una temperatura que no sea ni muy fría ni muy caliente, es decir: tibia. “La fría no disuelve la grasa y el agua caliente daña el cabello”, resaltó el experto.
Otras recomendaciones
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro, dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación señala algunos consejos para evitar ciertos tipos de pérdida de cabello:
- Tratarlo con suavidad: algunas personas cometen el error de peinar su cabello de forma brusca y halándolo con fuerza. Lo aconsejable es utilizar una peinilla que tenga dientes anchos, para evitar los tirones.
- Cuidado con los tratamientos: se debe evitar el uso de tratamientos fuertes como rizadores calientes o permanentes. Para el caso del cepillado y planchado, pueden realizarse moderadamente y aplicando productos que protejan al cabello de alta exposición al calor.
- Peinados: hay quienes maltratan su cabello al momento de recogerlo con una moña o banda elástica. Se debe moderar el uso de trenzas.